Este año, una de las distinciones fue para Ford, un perro pastor alemán con un olfato extraordinario que lleva un par de años subiendo a la cárcel dos veces al mes a detectar drogas, incluso a lomos de mulas. Acompañado de Laura Martín, su handler de la unidad canina de la Guardia Civil, recibió un arnés, una placa e incluso posó para fotografías. El agente, un diploma y una figura de Sargadelos.
Más premios en la cárcel de Pereiro
Este mismo reconocimiento especial, otorgado por la dirección, también fue otorgado al director y promotor de la escuela penitenciaria desde 1989, Manuel Víctor Rodríguez; a la coordinadora de Educación Vial, Sinda Aguiar; a la Federación de asociaciones de familiares y personas con enfermedad mental de Galicia; a la comisión asesora jurídica del Colexio da Avogacía; así como al Colexio de Xornalistas por su programa para enseñar a los internos a leer información. También completaron la lista la Unidad de Violencia sobre la Mujer de la Subdelegación y la empresa Herrajes Metálicos Acar.
Menciones honoríficas para seis funcionarios quien tuvo un papel destacado en evitar la muerte de un recluso el pasado 23 de marzo cuando intentó quitarse la vida.
Las medallas al mérito social penitenciario recayeron en el comandante de la Guardia Civil Rodrigo García, el sargento Luis Ángel Veloso así como en los policías nacionales Carlos Fernández Gago y Carlos Cid Vázquez.
La mención honorífica por 25 años de servicio como funcionarios penitenciarios fue para Antonio Lorenzo, Beatriz García y Eva Vázquez. Esta última fue la maestra de ceremonias del evento de ayer, por lo que, por un momento, tuvo que desdoblarse.
En una jornada en la que 236 internos pudieron disfrutar de una comida festiva (pulpo a feira, empanada, solomillo con salsa de setas, cerveza, helado, refrescos y café), se entregaron diplomas a cinco presos cuya evolución la junta de tratamiento: Rubén, Ángel, Javier, Antonio y José Luis.