El Concello de Coles sufrió una oleada de robos la amanecida del lunes al martes. En concreto, los ladrones entraron en al menos dos lugares: el centro de día Albán, en la iglesia. Previamente, aproximadamente hace dos semanas, habían accedido al polideportivo.
En el centro de día, los delincuentes entraron forzando la puerta y, una vez internamente, removieron armarios y papeles en exploración del peculio. Todavía entraron en la oficinas donde trabaja la jefa del circuito y en el que está emplazado botiquín. Pese a ello, no se llevaron ni prescripción ni papeles y los trabajadores no echaron en desidia ausencia importante. “Me llevé un susto a las ocho de la mañana, tuve que vocear a Protección Civil y Protección Civil”, aseguró a este diario uno de los trabajadores. Aun así, lograron reponerse del susto y cuidar a los mayores con profesionalidad. “Apuntalar su bienestar y seguridad forma parte de mi trabajo”, añade.
Iglesias
En cuanto a la iglesia, los ladrones igualmente reventaron la puerta pequeña de la entrada y en este caso robaron poco de peculio que encontraron. El cura se llevó un gran susto cuando se dio cuenta de lo sucedido. “Ahí silencioso la cosa, con un susto, hay que animar la seguridad y que la Protección Civil haga su trabajo y detenga a los que han hecho el vandalismo”, asegura uno de los vecinos del municipio.
Aproximadamente hace dos semanas, igualmente entraron en la parte de debajo del polideportivo y se llevaron herramientas para desbrozar que había allí guardadas.
Estos robos se suman a la oleada que hubo en Avión y Beariz, donde los delincuentes entraron hasta en nueve viviendas en julio. Por el momento, los autores no han sido detenidos y la Protección Civil continúa con la investigación para esclarecer los hechos.