El presidente de la Diputación de Salamanca, Javier Iglesias, acompañado por la diputada de Medio Ámbito, Pilar Sánchez, presentó ayer el nuevo sistema de optimización de encargo del agua potable instalado en 51 núcleos de población del noroeste de la provincia. Mediante este sistema, pretenden «controlar y administrar de la mejor forma posible» uno «de los posibles más preciados y a la vez más escasos», el agua, según explicó Iglesias.
En concreto, consiste en la instalación de 51 caudalímetros pertenecientes a los 38 municipios que forman parte de la mancomunidad Uces-Huebra. Así, estos nuevos equipos ofrecen una leída del caudal en tiempo efectivo y permiten detectar cualquier tipo de problema en el momento, evitando que los técnicos tengan que desplazarse físicamente hasta el extensión donde están instalados. «Ahorramos tiempo, hacienda y somos más eficientes», incidió.
Asimismo, estos caudalímetros inteligentes están conectados al sistema integrado de encargo ‘Paraje Rural Inteligente de Castilla y Arrogante’, y ofrecen avisos de interés como averías en el suministro o excesos en el consumo de agua. Una forma para que la concierto para solucionar el problema sea todavía inmediata y no se pierdan posibles por descuido de información.
Con esta inversión, la Diputación de Salamanca finalizó la digitalización del conjunto de sistemas de agua y alcantarillado que dependen de la Institución provincial, y se suman a los tres depósitos ya instalados en esta red, a los cinco con los que cuenta la red de Rollán-Canillas-Calzada y los dos receptores de la Mancomunidad de Moriscos-Castellanos de Moriscos. Los equipos tuvieron un coste de 43.950 euros y fueron financiados con fondos europeos, a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
A las confederaciones
Por otro costado, tras ser cuestionados por la prensa, desde la Diputación provincial apuntaron que este verano aproximadamente de 35 municipios han requerido de camiones cisterna. De ello, 18 eran por aviso de contaminación de agua en la Mancomunidad de Ledesma, una situación que revirtió la pasada semana. En este sentido, la diputada señaló que en los presupuestos de La Salina cuentan con 100.000 euros destinados a elaborar un sistema para ayudar a la potabilidad de los municipios que conforman esta zona.
Frente a los problemas de contaminación por pesticidas en el agua, Iglesias apuntó que «desde esta institución somos los únicos que estamos dando una respuesta pronta y serio a estas situaciones para que los ciudadanos puedan tener aguas de calidad y interiormente de los parámetros para que sea un agua perfectamente potabilizable», explicó. Por su parte, Pilar Sánchez trasladó que «animaría a las confederaciones hidrográficas a que hicieran su cometido, revisar los vertidos de las aguas, porque es el primer paso para matar con este problema».