Sobre las diez de la mañana de este jueves arrancaba el discurso de Salvador Illa, candidato del PSC a presidir la Generalitat de Cataluña, en el hemiciclo autonómico. El inicio del pleno ha estado afectado por la aparición de Carles Puigdemont a España, que ha desaparecido tras dar un discurso rodeado de simpatizantes en las inmediaciones de la Cámara. Los Mossos d’Esquadra han desplegado la ‘operación cárcel’ para intentar dar con el prófugo de la probidad española.
El discurso de socialista, que ha durado cerca de de unos 45 minutos, ha estado afectado por sus reiteradas alusiones al expresidente catalán Josep Tarradellas i Joan. Ha comenzado diciendo que “su sentido institucional, sus títulos y convicciones, su tenacidad y perseverancia lograron un hito que muchos creían impracticable: apoyar viva a la institución”.
“Cataluña no puede perder tiempo”
Tras ello, ha hecho referencias a la polémica Ley de Gracia ya en vigor. El líder de los socialistas catalanes ha manifestado su compromiso de defender la norma aprobada recientemente y de restablecer los derechos íntegros de la ciudadanía. “Pido respeto a la esfera de valentía, al poder parlamento. Y la aplicación ágil, rápida y sin subterfugios de las disposiciones de esta ley. Cataluña ha de mirar delante. Cataluña no puede perder tiempo. Cataluña ha de contar con todos”, sentenciaba entre aplausos. Mientras, el escaño de Carles Puigdemont continúa infructifero sin entender dónde se encuentra.
Illa defiende la financiación singular para Cataluña
Por otro flanco, el candidato a presidir el gobierno autonómico durante los próximos 4 abriles ha sacado pecho del acuerdo de financiación singular para Cataluña que pactó con ERC a cambio de obtener sus apoyos para ser investido. “Un paso delante sustancial y necesario para nuestro autogobierno que no pone en peligro el principio de la solidaridad”, ha señalado. “Mi objetivo es unir y servir para todos los catalanes”, añade.
Illa todavía se ha referido al acuerdo aprehendido con los Comunes. Sobre él, ha valorado las políticas de vivienda “tan ambiciosas”. En líneas generales, ha defendido uno y otro pactos con los dos partidos al consolidar que “enriquecen, mejoran y contribuyen”. Y ha recalcado que “son acuerdos de investidura, no de reunión“.
En caso de que reciba los 68 apoyos que necesita para ser investido durante la votación, Illa ocupará la presidencia de la Generalitat con otro compromiso: el de velar por una nación sustentada en la unión y la civilización. “Nuestra nación tiene que ser abierta, plural y diversa que se implica en una España plurinacional. Ese es mi planteamiento y el contexto”, ha manifestado.
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