En la ciudad iraní de Nour, ubicada en la norteña provincia de Mazandaran, una mujer de 31 primaveras ha quedado paralítica tras ser disparada por las fuerzas de seguridad por la espalda. El motivo del ataque reside en que no llevaba el velo islámico obligatorio en el país.
Arezou Badri, causa de dos niños pequeños, desatendió la orden de parada dada por los agentes, que intentaron detener su coche al darse cuenta de que existía una orden para requisar el transporte por un delito de no respetar el cumplidor código del hiyab.
En Irán se ha estado implementando este modus operandi, en el que las autoridades pertinentes incautan el transporte de mujeres, para forzar el uso obligatorio del velo. Así lo transmitieron las propias autoridades a través de un mensaje de texto en el que alertan a los dueños de los coches confiscados acerca de su confiscación.
Dispararon a la mujer por la espalda
En un primer momento, los agentes apuntaron a las ruedas del transporte, pero, seguidamente, apuntaron en dirección a la mujer y le dispararon en la espalda.
Tras diez días en cuidados médicos, los sanitarios han acabado extraer la bala ubicada en la cintura de Badri. Aun así, sus pulmones y su núcleo espinal quedaron gravemente dañados tras el suerte, impidiéndole caminar.
Según informan los médicos, todavía es pronto para determinar si la mujer podrá retornar a peregrinar, pudiendo ser su parálisis temporal o definitiva.
Actualmente, Badri se encuentra bajo estrictas medidas de seguridad en la Dispositivo de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Valiasr de Teherán.
Durante toda la estancia hospitalaria de Badri, los agentes solo permiten que reciba visitas de sus familiares durante escasos minutos. Por otra parte, les confiscan el teléfono para que no le puedan hacer fotografías de la víctima.
‘Plan luz’
Irán puso en marcha el ‘Plan Noor‘, conocido en España por su tracción: ‘Plan Luz’. Esta medida, que comenzó el 13 de abril, exploración reimponer el uso obligatorio del velo islámico.
Esta campaña ha traído consigo detenciones de mujeres que, bajo la examen de las patrullas de la pudoroso, no estaban cubiertas de la forma adecuada.
Las detenidas han denunciado en numerosas ocasiones diversas agresiones durante los valor. Por otra parte, aquellas que han denunciado estos malos tratos a través de las redes sociales igualmente han sido detenidas.
Según medios locales, algunas detenidas fueron “golpeadas en el pecho y los genitales“. Por otra parte, igualmente informaron acerca de agresiones con porras y pistolas Táser.
Ahmad Reza Radan, caudillo de la Policía de Irán, aseguró que la campaña para reimponer el velo islámico continuaría “con fuerza”. Estas declaraciones tuvieron circunscripción posteriormente del regreso de las patrullas de la pudoroso a las calles del país, que es el cuerpo responsable de aplicar el cumplidor código de vestimenta islámica.
“Con el apoyo del Parlamento, el Gobierno y el Poder Contencioso, y con el apoyo del pueblo, continuaremos la aplicación del ‘Plan Luz’ con fuerza, precisión e inteligencia”, afirmó el caudillo.
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