Hace un tiempo que Farida Erinesto y Faustina Daudi, de 29 y 27 primaveras, decidieron dedicarse a Todopoderoso en cuerpo y alma. Ayer, luego de dos primaveras como postuladas, tomaron el experiencia en el Convento de las Clarisas Reparadoras de Vilar de Astrés. “Estamos muy contentas y llenas de ilusión, porque damos un paso más en nuestra vida”, aseguran.
La ceremonia fue emotiva y específico. Las postuladas iban vestidas de novias hasta el momento de ponerse el experiencia. Fue entonces cuando se despojaron de la ropa seglar y se quedaron con una túnica blanca, para acoger el traje que las acompañará a partir de ahora. Adicionalmente de este ritual, el prelado les realizó una serie de preguntas para que ellas tendrán que explicar por qué piden ser admitidas.