Un policía para cada 3.000 habitantes en plena tensión con inmigrantes y el PSOE de Guardamar rechaza poner refuerzos


La proporción de policías locales para la población de Guardamar del Segura (Alicante) está muy allí de lo recomendable por los expertos, una carencia salvoconducto adicionalmente en un momento en que el corregidor ha reclamado al Gobierno medidas urgentes delante una oleada de delitos y violencia tras la presentación de inmigrantes enviados por la crisis de los menas hace unas semanas.

El clima de inseguridad denunciado por los vecinos tuvo eco mediático en toda España por las quejas de las víctimas, como una octogenaria que sufrió varios robos y un agente amenazado con una cortaplumas, entre otros afectados.

No obstante, el PSPV-PSOE que dirige el equipo de gobierno municipal ha votado en contra de regularizar la situación de la plantilla de su Policía Específico, como le han propuesto en el Pleno los tres partidos de la examen, PP, Vox y Esquerra Unida.

Con 18.000 habitantes censados, el doble de esa emblema de población no empadronada y la presentación de turistas en estas fechas, Guardamar supera los cien mil residentes en agosto y cuenta de forma efectiva con 32 policías locales para patrullar las calles. Esa ratio significa un agente para cada más de 3.000 personas, lo que casi quintuplica lo sensato por la Convenio Española de Municipios y Provincias (FEMP).

«La equivocación de personal policial es amenazador entregado que, aun contando con 42 plazas, son seis policías los que se encuentran en segunda actividad cuyas funciones son administrativas y custodiar edificios públicos, un agente está en excedencia voluntaria, todavía existen tres plazas vacantes ya sin posibilidad de inaugurar ninguna bolsa más y nada más son 32 policías los que pueden patrullar, en diferentes turnos, para todo el término municipal de Guardamar que alberga numerosas urbanizaciones, campo, huerta y casco urbano», detallan desde el Sindicato Profesional de Policías Locales y Bomberos (SPPLB) y la Convenio de Sindicatos de Empleados Públicos (FESEP), que arroparon a los agentes en una manifestación de protesta hace unos días.

«En Guardamar la sensación de inseguridad que se respira entre los ciudadanos es horrible, pero al Gobierno municipal socialista le da igual y así lo demostró votando en contra a la moción conjunta entre PP, Vox y EU para la adecuación y regularización singular de los puestos del colectivo policial por los cuales lleva cinco primaveras de lucha, pero incluso de excusas y mentiras por parte del corregidor del municipio», han denunciado, para hacer ver que las carencias se arrastran desde hace tiempo, aunque recientemente se agravan por la oleada de delitos.

Estos sindicatos, que pusieron la voz de alerta con la atención de los medios de toda España, advierten de que «con los efectivos que son, es impracticable respaldar la seguridad ciudadana; el servicio es insuficiente».

Allí de ver una decisión a corto y medio plazo, SPPLB y FESEP consideran que el contexto empeora, entregado que la Policía Específico «lleva desde el 2019 pidiendo al Consistorio, liderado por el corregidor socialista José Luís Sáez Pastor, que mejore sus condiciones laborales y la de los empleados públicos y así evitar la fuga de agentes que el municipio está sufriendo, pero Sáez no ha llevado a parte ninguna medida para evitar esta problemática sino al contrario, lo que ha hecho es dedicarse a agravarla saliendo en varios medios de comunicación llamando al Cuerpo de Seguridad guardamarenco irresponsables y chantajistas».

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