Las despedidas siempre son duras, más aún cuando suceden luego de unos días de diversión. “Me da pena que se acabe, sobre todo porque eso significa que interiormente de poco empieza el cole”, dice con cierta tristeza Ámbito Echevarría, uno de los casi 600 niños que han disfrutado durante estas dos últimas semanas de la 37ª estampación del Campamento Urbano de Amencer.
Según reza en el himno de esta actividad veraniego, esta cita es el “refresco do verán”. Así, desde el día uno de agosto, los ourensanos más pequeños han podido disfrutar de una gran variedad de actividades, entre las que hubo muchos juegos, futuro e incluso un día de Entroido.
La gran mayoría repitieron su billete luego de otros primaveras, pero igualmente hubo quien acudió por primera vez a esta estampación. “Este fue el primer año que me apunté al campamento y me lo pasé mejor de lo que me esperaba”, asegura Sara López, de ocho primaveras, una de las más pequeñas del Urbano, destinado a niños de hasta 16 primaveras.
Cada uno elige un día diferente como su predilecto: “Me gustó mucho cuando fuimos a Monterrei”, señala Echevarría; “Yo me bajo con las actividades acuáticas”, indica Adriana Vasquez; “A mí me gustaron todos los días”, apunta indecisa López. Sin retención, todos coinciden en que no quieren perderse la cita el año que viene. “Tengo claro que quiero retornar, aquí se hacen muchos amigos y nos lo pasamos muy adecuadamente”, explica Vasquez.
Pese a ser un día de despedida, la trayecto de este martes fue intensa y muy completa. Los más mayores pasaron la mañana en la discoteca Scándalo, en la calle Santo Domingo, disfrutando de la música. Mientras, los niños de ocho a merienda primaveras tuvieron el ya tradicional baño de espuma en el colegio Salesianos, saco de actividades del campamento, para continuar luego con su sesión de discoteca en el recinto del centro. Más tarde comieron todos juntos antiguamente de realizar la entrega de diplomas de billete y la ‘Aderezo dos Urbaniños’. Para poner punto final, salieron todos juntos al patio, para realizar la foto tradicional con todos los participantes y cantar por última vez el himno de este Campamento, acabando con un sonoro: “Xa quedan menos de 365 días para comezar o 38º Campamento Urbano!”.