Noemí Martínez, la mujer acusada de matar a su hija Olivia, de 6 años, en Gijón, ha sido encontrada este domingo ahorcada en su celda. Según han confirmado a la agencia EFE fuentes judiciales, la verdadera mujer se habría suicidado en el Centro Penitenciario de Asturias, donde cumplía condena por el delito cometido en octubre de 2022.
Instituciones Penitenciarias no han confirmado la identidad de la persona encontrada muerta ni los motivos de su muerte, pero sí confirmaron que este domingo a las 7:00 horas, durante una de las rondas de vigilancia, encontraron a una persona sin vida en su celda. Varios medios asturianos y agencias nacionales se han encargado de confirmar que la fallecida era Noemí Martínez.
Asesinó a Olivia poco después de enterarse de que perdía la custodia
El crimen de Olivia tuvo cierto revuelo mediático en España por su crueldad. El pasado 30 de octubre, la Policía encontró a una madre y su hija, en el barrio gijonés de El Llano, tendidas en el sueldo. La pequeña murió tras consumir drogas. Según la autopsia, sufrió una sobredosis de lorazepam, casi más del triple de lo necesario para acabar con la vida de un adulto.
Un día antes del crimen, el juez había concedido la custodia del menor al padre, en litigio con la madre, que permanecía en el Centro Penitenciario de Asturias desde el pasado 2 de noviembre cuando el titular del Juzgado de Instrucción número 1 decretó su ingreso. en prisión provisional, comunicada y sin fianza.
Noemí tenía 48 años cuando mató a su hija
Tras recibir una llamada alertando de la desaparición de ambas, los agentes lograron entrar en el piso, situado en la cuarta planta del número 71 de la calle Gaspar García Laviana, y encontraron a la niña ya fallecida. Madre e hija, naturales de Segovia, se habían trasladado a Gijón unos meses antes.
La mujer indicó que había tomado pastillas y fue evacuada, ya detenida, al hospital Jove de Gijón para permanecer en observación durante toda la noche, antes de ser trasladada al día siguiente a comisaría.
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El padre del menor, Eugenio García, que fue alertado en su domicilio de Segovia por agentes policiales, se desplazó conmocionado hasta Gijón, donde contó a los periodistas que acababa de obtener la custodia tras un proceso que se había prolongado durante cinco años. .
La niña había quedado al cuidado de la madre durante el fin de semana y el padre tenía previsto viajar con la menor a Segovia el lunes siguiente.