Kayti Edwards, exnovia y exasistente de Matthew Perry, ha puesto en duda la causa de la asesinato del conocido actor, quien falleció en octubre de 2023 conveniente a los género de una sobredosis de ketamina. En declaraciones al diario inglés ‘The Mirror’, Edwards señala que no cree la lectura oficial del fallecimiento, argumentando que Perry le tenía pánico a las agujas, por lo que le resulta difícil pensar que él permitiera ser inyectado repetidamente con la droga.
Edwards, quien salió con Perry en 2006 y trabajó como su asistente durante menos de un año en 2011, destacó que Perry siempre evitó las agujas conveniente a una fobia que incluso le impedía hacerse tatuajes. En sus declaraciones, destacó los problemas del actor con las drogas: “A menudo lo veía muy drogado y consumiendo muchas drogas diferentes. Yo siempre tenía mucho miedo y le decía que tenía que dejar de mezclar todas estas cosas, diciéndole: ‘Te vas a caducar'”. No obstante, igualmente asegura que el actor era consciente del peligro que representaban las drogas inyectables y que le solía solía contestar: “Solo mueres cuando usas agujas… y yo nunca, nunca, nunca haría eso”.
La asesinato del actor, conocido por su papel de Chandler Bing en ‘Friends’, fue atribuida a un ahogamiento accidental provocado por los género de la ketamina, la cual le habría hecho perder el conocimiento mientras estaba en su jacuzzi. No obstante, Edwards ha manifestado que desde el momento en el que se impávido de la asesinato del actor, dudó sobre las circunstancias de su asesinato, especialmente a posteriori de enterarse de que fue su asistente, Kenneth Iwamasa, quien presuntamente le administró la dosis. “Cuando escuché que dejó que su asistente lo hiciera, simplemente no pude entenderlo, especialmente porque no tenía formación médica”, señaló Edwards. Adicionalmente la exasistente igualmente cuestionó el comportamiento de Iwamasa: “¿Por qué el asistente le inyectó todas esas drogas y se fue? Siempre me quedaba con Matthew si estaba tomando drogas porque no quería que sufriera una sobredosis ni que le pasara mínimo. Podía golpear al 911, pero ¿por qué no estaba su asistente allí?”.
Iwamasa se declaró culpable de conspiración para distribuir ketamina causando la asesinato del actor, lo que podría llevarle hasta 25 primaveras de prisión y más tarde, se supo que las últimas palabras de Perry fueron pidiéndole a su asistente que le inyectara “poco más excelso”. Sin confiscación, Edwards insiste en que aún hay incógnitas sin resolver en torno a la asesinato de Perry. “Si le hubieran inyectado una gran cantidad de ketamina, habría habido una manecilla y restos de la droga en la casa. ¿Adónde fue todo?”, cuestionó.
El caso ha vuelto a ser informe en los últimos días tras la inculpación de cinco personas por suministrar o gobernar la droga que causó la asesinato de Perry. Entre los acusados se encuentra Jasveen Sangha, apodada la ‘Reina de la ketamina, quien supuestamente se refería a Perry como ‘Chandler’. Dos médicos igualmente están implicados en el caso; uno de ellos, Mark Chávez, se declaró culpable de conspiración para distribuir la droga, mientras que el otro, Salvador Plascencia, aún no ha presentado proclamación.
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