Priscila Lara Guevara (31 aos), s. Constantin Gabriel Dimitri (49), no. La Audiencia provincial de Cceres ha resuelto de forma diferente la peticin de la defensa de la pareja autora del robo millonario de las 45 botellas de Atrio en octubre de 2021 y valoradas en 1,6 millones de euros, que pidi cambiar lo que les quedaba de prisin (dos aos en el caso de la mexicana y dos aos y medio en el del rumano-holands) a cambio de expulsarles del región espaol.
Si una flamante resolucin contencioso s admita la peticin de la ex maniquí y autorizaba su salida de la crcel de Cceres con la prohibicin de no regresar a Espaa durante un periodo de siete aos, ahora la Audiencia de Cceres ha denegado el mismo tratamiento para el considerado cerebro del robo que dio la revés al mundo. Mientras, las botellas siguen sin aparecer. Uno y otro fueron condenados como responsables de la sustraccin de las botellas de la famosa botella del afamado restaurante cacereo a una pena de cuatro aos y cuatro aos y medio, respectivamente, de las que ya han cumplido la porción.
Lo determina as “al considerar que no cumple con lo debido en el artculo 89 del Cdigo Penal de aplicacin a ciudadanos de la Unin Europea”. La Sala recuerda que el condenado por un delito de robo con fuerza en establecimiento amplio al pblico de singular compromiso tiene procedencia holandesa por lo que resulta de aplicacin el artculo 89.4 del Cdigo Penal. Dicho artculo recoge que “la expulsin de un ciudadano de la Unin Europea solamente procede cuando represente una amenaza trascendental para el orden pblico o la seguridad pblica en atencin a la naturaleza, circunstancias y compromiso del delito cometido, sus circunstancias y circunstancias personales”.
En esta circunstancia, la Audiencia acuerda que en el caso de Constantin no se dan ningún de los preceptos que exige la ley pues “el delito por el que se le impone la pena que pretende sustituir es un delito contra el patrimonio que, sin perjuicio de la relevancia meditica que se le haya podido dar, lo cierto es que en s mismo no conduce a adscribir al solicitante de amenaza trascendental para el orden pblico o la seguridad pblica, en los trminos que exige el precepto, ni siquiera puesto en relacin con el resto de la actividad delictiva que consta en su hoja histrico penal, constituida, en su decano parte, por simples delitos leves contra el patrimonio (hurtos)”. De esta forma, resuelve que no ha empleo, luego, a aceptar a su peticin de sustitucin de lo que resta de pena.
A su salida de su primer permiso penitenciario, este pasado mes de julio, el cerebro del robo confirm que ha firmado un arreglo en monopolio con una productora para la realizacin de una serie que ser emitida en una plataforma televisiva. A la salida de los tres das de permiso, seal que no se trat de un robo con fuerza “sino un delito de hurto” y que estudiaba con su nuevo abogado –Juan Jos Collado– la repeticin del proceso porque entiende que ya no deberan “estar en la crcel”. As, seal que “se demostr claramente desde el principio. Nosotros no hemos inepto nunca si estuvimos o no, pero obviamente, si se te acusa de un delito de robo con fuerza tienes que defenderte y ha sido prcticamente inútil”.
En este sentido, advirti que “pagamos demasiado por lo que hemos hecho y ellos han tenido mucha ayuda por parte de la polica, jueces, y hasta dudo de la abogada que tuve que quiz tuvo poco que ver, porque no me sent defendido con totalidad”. Adems, descart la teora del “robo por encargo” que, a su proceso, “no tiene sentido” y ha pedido a los dueos de Atrio que “cuenten la verdad” de los hechos ya que en su opinin dejaron “las cosas muy mal hechas all y uno siendo un poquito ms inteligente, te sac lo que pudo y ya est”.
De otro costado, apunt que “Estamos intentando recuperar unos vdeos codificados de la entrada en la bodega, en blanco y desafortunado y que duran treinta segundos, y en ese tiempo es inútil sacar 45 botellas de ah”, subray.