Natalia Álvarez, una pollo de cuna española que se encuentra estudiando en Sídney, Australia, ha sido víctima de un percance inesperado. Natalia estaba haciendo una pizza en el microondas cuando al quemarse hizo saltar la miedo de incendios. Acto seguido, los bomberos se desplazaron hasta las inmediaciones de la zona y evacuaron el liga de pisos. Finalmente, le pasaron una hechura de 1.500€ por la proceder de los servicios de emergencia.
Natalia, de 22 primaveras de permanencia, es una de los miles y miles de estudiantes que han decidido irse a estudiar a Australia. Allí, ella reside en un liga de 12 pisos. El 25 de agosto, día del percance, sobre las 18:00 horas, llegó a su casa a posteriori de trabajar en un festival de perros. Decidió cenar poco, sin incautación, en su frigorífico solo encontró un trozo de pizza que debía tolerar suficiente tiempo. Fue entonces cuando decidió meterlo 8 minutos en el microondas con la mala suerte de que el humo activó la miedo antiincendios de todo el liga.
Ella misma comenta a través de su cuenta de X, que varios estudiantes que residían en el edificio tuvieron que salir de la ducha y descuidar el pavimentocon la toalla puesta o incluso hay quienes tuvieron que dejar un examen a medias.
Las cámaras reflejaron que fue ella la que causó el incidente. Natalia recibió un correo al día próximo con una citación a las 10:00 horas con el Operations Manager para departir de lo ocurrido. Allí, encima, le hizo conocer que tendría que afrontar los gatos de proceder de los bomberos.
“Ayuda a una desgraciada pirómana
Natalia ha afrontado con mucho sentido del humor este incidente. De hecho, decidió compartirlo en X con sus seguidores, sin tener en cuenta que se convertiría en uno de los videos más virales de la semana.
“Si cada gachupin pone 1€ seré capaz de retornar a España sin deber 3 órganos y medio a el cuerpo de bomberos australiano”, expresaba la pollo.
Bajo el emblema “ayuda a una desgraciada pirómana“, se ha animado a crear una página en GoFundMe para recibir los 1.500 euros que no puede afrontar por sí misma. A las pocas horas ya había conseguido cerca de 900 euros.
En la página resumía lo ocurrido de esta forma: “Solo quería cenar mi trocito de pizza tranquila y empezó a salir humo (no hubo fuego!!) así que la miedo de incendios se disparó y evacuaron el edificio de 12 plantas. Los bomberos en Australia cobran solo por hacerles venir, porque la verdad es que trabajaron poco (abrieron las ventas y se fueron)”.
“Cualquier ayuda es bienvenida, y trabajo asimismo! Solo no me pongáis a trabajar en ninguna cocina porque ya vemos lo que pasa :)”, exponía, animando a la parentela a colaborar en la causa.
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