La estrategia de hacer intervenir al exalcalde de Valladolid se decidió hace unos días. El líder del PSOE evita así tener que hablar de la amnistía
La decisión se tomó hace unos días. Con tiempo suficiente para que salga bien. Una decisión con el visto bueno de Pedro Sánchez. Siempre es el presidente quien decide, señala su equipo. Eso Puente de la cicatriz, ex alcalde de Valladolid, sería quien contestaría a Alberto Núñez Feijó, lo sabían cinco o seis personas. Los que sabían se pueden contar con los dedos de una mano, dice una persona cercana a Sánchez. En la reunión de madrugada del grupo parlamentario socialista no se comunicó a los diputados quién intervendría. Hermetismo. Secreto. No se podía decir por qué estaba goteando. Un golpe eficaz, pero que también puede tener contraindicaciones, admiten fuentes socialistas.
Porque la decisión de que Sánchez evitara el cara a cara con Feijóo y lo hiciera realizar por un diputado de base fue un arma de doble filo. El líder socialista sí intervino en la moción de censura impulsada por Vox, y protagonizada ramn tamames, que también se sabía que no tenía ninguna posibilidad. Pero ayer optaron por que lo hiciera un diputado socialista.
El tono también ha sido muy interno; un discurso para motivar al partido, dicen funcionarios del partido consultados por este diario. Para mi gusto, demasiado duro e innecesario en algunas partes, analiza un granero socialista. Fuentes gubernamentales admiten que podría haber sido una intervención dañina, de no ser por la crudeza de lo que decía.
LBÚM
Los protagonistas de la sesión de investidura
Los protagonistas de la sesión de investidura
La falta de respeto es suya, por pedir más de un mes, por apelar a los desviados… La postura la ha fijado un diputado socialista. Entendemos que no estuvieran muy contentos, explica el equipo de Sánchez. No es descrédito institucional, es táctica, defienden desde la sala de máquinas socialista. No nos preocupa la cuestión de la incivilidad. Lo importante es que nunca se han dicho tantas verdades. Scar ha sido una máquina quitanieves, afirman fuentes de La Moncloa.
El Parlamento es el Parlamento. ¿O Feijó ha sido blando?, defiende un diputado socialista. Hemos tenido años de ira ensordecedora, completa un ministro socialista.
Pero lo cierto es que la decisión de que Sánchez no interviniera provocó confusión, sí, pero también alentó el miedo entre algunos miembros del partido a que fuera visto como feo, descortés y despectivo. Tenemos mensajes y llamadas de socialistas que no han podido gobernar por los pactos PP-Vox para felicitarnos. La militancia está eufórica, afirman desde Ferraz.
Óscar Puente fue miembro de la Ejecutiva del PSOE hasta 2021 e incluso portavoz, aunque sólo protagonizó unas cuantas ruedas de prensa desde Ferraz, y la dirección optó por que otras personas se marcharan, aunque él siguió ocupando el cargo de portavoz. De origen sanchista, no ha dudado en criticar la gestión y algunas decisiones del Gobierno e incluso opinó sobre la posibilidad de que en Castilla y León el PSOE apoye al Partido Popular para que no tenga que depender de Vox.
Puente era la lista más votada en Valladolid, donde gobernaba desde 2015, pero un pacto entre PP y Vox le impidió repetir mandato. Esa es la clave de su elección: desmontar la exigencia de Feijó de que le dejaran gobernar por ser el más votado y poner el foco en el acuerdo PP-Vox.
Con el ‘de ganador a ganador’ de Óscar a Feijó se acabó el debate, dicen en el PSOE. Así explican los estrategas socialistas el motivo de su elección y de su estrategia: Se necesita alguien con aplomo que sepa decir todo lo que se dijo desde el podio. Con capacidad dialéctica. Scar es un buen luchador. Su primera intervención fue poner a Feijó en su lugar. Había que ponerlo en su lugar. Ponlo frente al espejo, desmantela su castillo de naipes y cornéalo. La segunda intervención fue más lenta, ya contrastante.
Lo cierto es que la decisión permitió a Sánchez evitar un debate en el que pronunciarse y abordar la amnistía. Porque la amnistía y las concesiones a los independentistas fueron una de las palancas con las que Feijó inició su intervención. La obra es buena. Hablemos de Puente y no de la amnistía, dice dirigente territorial. No se ha hablado de amnistía. Esto salió bien, afirman fuentes del gobierno estatal. Nos habían llamado para una investidura, para no hablar de la amnistía, argumenta el equipo de Sánchez. No nos van a dar ninguna lección sobre pactos con Puigdemont Cuando dan cobijo y hacen pactos, los pactos de vergüenza, con los nostálgicos del régimen de 1936, son observados por la dirección socialista.
Sorprendió en las filas del Gobierno y del PSOE que Feijóo no quisiera darles respuesta. Que desperdiciaría esa oportunidad. Hablan de error estratégico. tengo un discurso para Patxi (López) y por Pedro (Sánchez). No para un tercero. Descarta todos los argumentos que no ha esgrimido ni podrá volver a esgrimir contra el PSOE.