Las cifras hablan por sí solas. Según el Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales (EFFIS), en Estonia se registraron en 2022 un total de 26 incendios forestales que quemaron unas 20 hectáreas. En España, ese mismo año, se produjeron 10.507 incendios que acabaron con 267.947 hectáreas.
Las diferencias son notables entre un demarcación y otro, pero no hay duda de que el conocimiento con el que cuentan los efectivos de lucha contra el fuego en Galicia es un valencia al acrecentamiento teniendo en cuenta que los países del septentrión cada vez registran más incendios. Conocer los métodos, procedimientos y herramientas empleadas por el Servizo de Prevención e Defensa contra os Incendios Forestais (SPIF) de la Xunta es el objetivo de esta recepción y la valoración es más que positiva.
Martín Blanco, agente territorial anti incendios, fue el encargado de coordinar esta recepción: “Ellos están viendo que los incendios van en aumento en sus territorios y quieren formarse para poder finalizar mejor con ellos”, explica.
“Lo que más les impacto fueron los medios aéreos”
Un incremento que encima, nos cuenta, se da con episodios de simultaneidad y grandes extensiones quemadas, factores acertadamente conocidos por los efectivos gallegos. “Vienen a formarse en nuestras técnicas”.
Los bomberos estonios estuvieron dos semanas en Galicia y durante este período recibieron nociones sobre el comportamiento del fuego, los modelos de combustible en esta comunidad y asimismo vinculadas con la seguridad. “Lo que más les impactó fueron los medios aéreos, ellos no los utilizan para propalar agua y les dejó muy impresionados”, asegura Blanco. Todavía el hecho de poder habitar un incendio en directo. “Estuvimos muy cerca de las llamas en incendios como el que se produjo estos días pasados en Oseira y les impactó estar tan cerca de las llamas”, relata.
El Centro de Lucha contra el Fuego de Toén, referente internacional
Las instalaciones del Centro Integral de Loita contra o Lume (CILL) de Toén, en Ourense, fue el epicentro de la recepción. Se manejo de un referente internacional para la cooperación e investigación en materia de incendios forestales y esta recepción lo ha puesto de manifiesto. “Nosotros asimismo hemos aprendido de ellos. Sus incendios son de propagación lenta, son diferentes, siempre hay poco que educarse, todos salimos ganando”, explica el agente.
Y asimismo en lo personal. Una experiencia que asimismo ha sido enriquecedora a nivel cultural y personal: “Adicionalmente del intercambio de conocimientos hay un intercambio cultural y personal, un gran circunstancia”.
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