Los amantes del motor en Ourense se dieron cita este sábado por la mañana en la explanada del Campo da Feira para disfrutar de una viaje de celebración y exhibición en torno al mundo del automóvil.
Rodeando de un centenar de aficionados a los coches acudieron al emplazamiento para presenciar un espectáculo en el que no faltaron los derrapes, los rugidos de motor y el ya clásico olor a resina quemada. No solo los coches fueron los protagonistas de la exhibición, igualmente algunos valientes mostraron sus peripecias en vehículos de dos ruedas como quads y motos.
Tras verlos liquidar un poco de asfalto, los asistentes pudieron de cerca los coches expuestos en el parquin. Entre los turismos presentes había auténticas joyas del motor que, pese al paso de los primaveras, siguen acaparando más miradas que algunos coches nuevos.