Tesoros de Ourense | Melón: patrimonio, naturaleza y sosiego


El Concello de Melón, enclavado en el corazón de la comarca do Ribeiro, es un rincón donde el tiempo parece fluir a un ritmo diferente, preservando la esencia de la historia, la civilización y la belleza natural de Galicia. Desde los vestigios de sus primeros asentamientos en tiempos prehistóricos hasta el esplendor medieval con la fundación del Monasterio de Santa María de Melón en el siglo XII, cada piedra y cada sendero de este municipio cuenta una historia. Hoy en día, Melón es un destino que invita a la aventura y al sosiego con su naturaleza exuberante y paisajes de ensueño. El río Cerves, serpenteando por sus tierras, crea espectaculares fervenzas y pozas, ofreciendo a los visitantes la posibilidad de sumergirse en un entorno de paz y contemplación. En Melón, su restauración, que incluye delicias como el pulpo a la gallega y el lacón con grelos, deleita los paladares de quienes buscan regocijarse lo auténtico, todo ello, acompañado de los reconocidos vinos del Ribeiro.

Monasterio de Santa María de Melón

Melón 28/8/24
Tesoros escondidos en el concello de MelónMonasterio de Santa María de Melón

Fotos Martiño Pinal
Monasterio de Santa María de Melón (Foto: Martiño Pinal)

Es uno de los testimonios más importantes de la edificación cisterciense en Galicia. Fundado en 1142 por la orden del Císter, surgió gracias a una donación de Alfonso VII. Su crecimiento les permitió practicar un considerable control sobre la población circunscrito, imponiendo impuestos y acumulando poder hasta el siglo XV. A lo espléndido de los siglos, el monasterio experimentó varios cambios pero a pesar de ellos, el monasterio mantuvo su actividad hasta el siglo XIX, cuando la desamortización de Mendizábal en 1835, unido con los daños causados por fuertes tormentas, llevaron al desistimiento de la vida monacal en el circuito. Hoy en día, la iglesia del monasterio sigue en uso como iglesia parroquial, conservando su planta de cruz latina, con una cabezal notablemente austera, en consonancia con los principios de la orden del Císter. Destacan su capilla de fosa y el diseño poligonal del ábside del presbiterio. En los últimos primaveras, el monasterio sufrió un trascendental estropicio oportuno al desistimiento y a los saqueos. A la entrada, los visitantes pueden ver la puerta monasterial con la imagen de la Inexplorado María y los escudos del Císter, unido a los restos de una gran arquería y un impresionante palomar.

Pozas de Melón

Son un auténtico espectáculo natural que ofrece un refugio consumado para los amantes de la naturaleza y el senderismo. Este río, que nace en la Serra de Faro de Avión a unos 1.000 metros de importancia, desciende vertiginosamente cerca de Melón, creando a su paso impresionantes rápidos, cascadas y pozas de agua cristalina. Aquí se concentra la maduro parte de estas formaciones, que en verano se transforman en piscinas naturales. El paso más factible a estas pozas se encuentra en la antigua N-120, en A Freixa. El entorno de las pozas de Melón es un reconvención ahíto de sorpresas para quienes disfrutan de la belleza natural. Un sendero cobrador a lo espléndido del ganancia derecho del río faro a los visitantes a través de un paisaje de frondosa plantas y formaciones rocosas. Durante el trayecto, se pueden descubrir nuevas cascadas y pozas ocultas entre las rocas, como una espectacular fervenza que cae desde una importancia de unos 15 metros. La mejor época para disfrutar de la serenidad y frescura de estas pozas es la primavera.

Fervenzas do Tourón

Uno de los espectáculos naturales más impresionantes del río Cerves. El paso a este sitio natural comienza con una desviación que asciende enfrente del Monasterio de Santa María de Melón. Una vez en el camino, el bosque de carballos centenarios y las pequeñas corrientes de agua acompañan al visitante. En el radio conocida como O Ceo, la ruta alcanza su culminación con una pequeña poza y una cascada que vierte sus aguas desde las directiva. Sin retención, este rincón paradisíaco es todavía desafiante, con superficies rocosas y resbaladizas que exigen máxima precaución para evitar accidentes.

Conjunto de hórreos de Quins

Melón 28/8/24
Tesoros escondidos en el concello de Melón
Hórreos de Quins
Fotos Martiño Pinal
Hórreos de Quins (Foto: Martiño Pinal)

Aquí se encuentra una de las mayores concentraciones de hórreos de Galicia. Son 24 hórreos agrupados en dos conjuntos, que permitieron durante siglos el almacenamiento seguro y seco de productos agrícolas como el maíz. La preservación de estos hórreos refleja la acondicionamiento de los métodos de conservación de alimentos a lo espléndido de la historia y su importancia como patrimonio cultural. El Conjunto de Hórreos de Quins es único por su disposición y por los materiales utilizados en su construcción, que van desde el roca hasta la madera. Se localizan en una montículo, donde todavía se encuentra un conjunto de cruceiros que representan el Monte del Calvario, uniendo tradición agrícola y religiosa. Algunos hórreos aún conservan sus techos de teja o losas de roca, mientras que otros muestran una mezcla de técnicas constructivas únicas. Este patrimonio fue parcialmente rehabilitado en 2007, garantizando su perdurabilidad y transmisión cultural. El concello alberga otros conjuntos de hórreos, los de O Casal, con 19 estructuras de diversas tipologías que muestran su diversificación arquitectónica y utilitario.

El buen sabor del pulpo á feira y el lacón con grelos

La plaza de Melón, en Ourense, es un destino que despierta los sentidos y calma el espíritu, ideal para quienes buscan el deleite de la buena mesa y el alivio en un entorno natural privilegiado. Aquí, la rica tradición gastronómica gallega se vive con intensidad: desde el pulpo á feira, cocido al punto consumado, hasta las jugosas empanadas gallegas, o al inigualable lacón con grelos. Cada plato es un reflexiva de la historia, la tierra y el carácter de esta zona. Por otra parte de sus platos icónicos, Melón presume de una variedad de productos locales que complementan su ofrecimiento gastronómica y sus vinos del Ribeiro por su profundidad y carácter. No es solo una comida; es un alucinación a través de los sabores, una conexión con sus raíces y su familia. Es todavía un refugio para escapar del calor veraniego que se intensifica en Ourense, o simplemente un oficio ideal para hacer una parada en el camino, respirar el elegancia puro de la naturaleza y envolverse en la tranquilidad de sus paisajes. 

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *