No tenía sentido, esta operación causó molestias innecesarias


En un impactante construcción de los acontecimientos, Jordi Turull, mano derecha de Carles Puigdemont, ha revelado nuevos detalles sobre los movimientos del expresidente catalán ayer de su huida definitiva a Bélgica. Según Turull, Puigdemont llegó a Barcelona dos días ayer del debate de investidura de Salvador Illa y se ocultó en varias casas particulares cerca del Arc de Triomf, evitando así la vigilancia de la policía. Estas declaraciones arrojan nueva luz y abre nuevos frentes sobre los días previos a su segunda huida al expulsión, tras tener desaparecido del tablas sabido con la ayuda de su abogado.

Arrancó su coche en dirección a Barcelona el martes 6 de agosto

De acuerdo con Turull, Puigdemont arrancó su coche en dirección a Barcelona el martes 6 de agosto, cerca de de las 18:30 horas, entrando por la autopista AP-7. A partir de ese momento, se trasladó de pavimento en pavimento, saltando entre distintas ubicaciones para escamotear la intensa búsqueda policial que lo perseguía. Durante el mediodía del día subsiguiente, mientras las fuerzas de seguridad peinaban la ciudad en su búsqueda, Puigdemont cambió nuevamente de escondrijo, moviéndose a un pavimento más alejado del Parlament. Finalmente, decidió no personarse a la investidura de Illa adecuado al vasto dispositivo policial que lo acechaba, conocido como `Operación Trena´.

Este despliegue, diseñado para cercar al expresidente y evitar su fuga, finalmente no logró su objetivo ya que volvió de nuevo a escaparse del país. Turull ha asegurado que Puigdemont permaneció en Cataluña hasta las 20:00 horas, momento en que salió rumbo a Bélgica, específicamente a Waterloo, donde ha residido desde entonces.

Albert Palacio: “es posible que se hubiera escondido en un pavimento hasta que la Operación Trena aflojase”

En el software en directo de “Espejo Notorio”, Albert Palacio, exportavoz de los Mossos d’Esquadra, fue consultado sobre la certeza de la interpretación presentada por Turull. Palacio se mostró escéptico, afirmando que es “un poco complicado” que Puigdemont pudiera moverse de pavimento en pavimento en tres ocasiones diferentes, considerando el amplio cordón policial desplegado. “No es ordinario, pero siquiera irrealizable”, indicó Palacio. No obstante, añadió que “es posible que se hubiera escondido en un pavimento hasta que la Operación Trena aflojase”.

“Esta operación causó molestias innecesarias”

La Operación Trena, que evoca saludos de su implementación durante los atentados de 2017, incluso fue tema de debate. Palacio expresó su opinión crítica en presencia de la utilización de esta operación: “Para nosotros, no tenía sentido. Esta operación causó molestias innecesarias, y creo que no era el momento adecuado para llevarla a extremidad”.

Finalmente, en relato a Josep Lluís Trapero, quien recientemente retomó el mando de los Mossos d’Esquadra, Palacio se mostró cauteloso respecto a la posible perfeccionamiento en la reputación del cuerpo policial. “Ahora pasa de policía a político, y todos sabemos lo que eso significa. Quizá no tenga la misma autonomía que tenía como policía, pues ahora tendrá políticos por encima”, concluyó.

Las revelaciones de Turull han reavivado el debate sobre los últimos movimientos de Puigdemont en Cataluña y la eficiencia de los dispositivos policiales implementados para capturarlo. Con Trapero nuevamente al frente de los Mossos, el futuro del cuerpo policial en el contexto político flagrante sigue siendo una intríngulis.

ONG, optimización de donaciones

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *