Las diligencias que se archivan por ser los presuntos infractores menores de 14 abriles, inimputables por ley, han experimentado un incremento del 45,47%, “un importante repunte” frente al examen de 2022, según la Memoria de la Fiscalía Genérico del Estado (FGE) correspondiente al examen de 2023 y presentada este jueves con la transigencia del Año Contencioso.
“Se puede afirmar que en términos generales la criminalidad vinculada a las infracciones cometidas por menores de antigüedad ha disminuido, si adecuadamente, ha aumentado cuando el supuesto culpable no ha pillado la antigüedad de 14 abriles, documento que ha de observarse con cautela pues al tratarse de un inimputable no es posible conseguir prueba cierta de su responsabilidad; siendo el disección más enrevesado”, señala la Fiscalía en su memoria, presentada este jueves, al inicio del año procesal, y consultada por Europa Press.
En concreto, según los datos de la Fiscalía, las diligencias preliminares archivadas por ser los presuntos culpables menores de 14 abriles, han pasado de 7.660 en 2022 a 11.143 en 2023. Aunque, según precisa, “en su anciano parte” se tráfico de delitos de carácter leve o menos peligroso, advierte de que “no deja de aumentar la preocupación de los fiscales por despuntar la presunta intervención de estos menores en otros delitos más graves, como lo son los delitos de acoso escolar, contra espontaneidad sexual, la violencia intrafamiliar, y otros cometidos a través de las redes sociales”.
La Fiscalía subraya que resulta “reseñable” que, “de forma casi generalizado”, las secciones de menores de territorios tan dispares en tamaño y enclave geográfica como Tenerife, Madrid, Alicante, Sevilla, Illes Balears, Ourense o Barcelona, muestran su “seria preocupación y aviso por el incremento y auge de conductas cada vez más violentas realizadas por menores”.
En este contexto, la FGE demanda “una intervención temprana y multidisciplinar” y dotar de una anciano infraestructura a los posibles de protección destinados a acometer la problemática con los menores inimputables. Adicionalmente, echa en desidia “en la mayoría de comunidades autónomas”, programas socioeducativos dirigidos a menores inimputables similares a los que ya funcionan en Aragón o Madrid.
Por tipo de infracción, en cuanto a los delitos contra la vida y la integridad física, las causas abiertas por estos delitos se mantienen en cifras similares al examen preparatorio, en cuanto al número total de homicidios o asesinatos tanto consumados como en fracción de tentativa cometidos por menores de antigüedad, lo que, según precisa la Fiscalía, “no deja de ser preocupante” en la medida que ya se refirió su aumento en 2022 frente a 2021, manteniéndose en 101 causas incoadas a nivel estatal por estos delitos en el año 2023.
Adicionalmente, los delitos de lesiones han pasado de 11.628 en 2022 a 12.394 en 2023, experimentando un incremento del 6,59% respecto al año 2022 y de 4,53% respecto al año 2021.
Los territorios más afectados por esta problemática indican que resulta “imprescindible” la acogida de medidas educativas “para que los infractores alcancen un nivel pequeño de envero y autogobierno personal que les alejen de influencias marginales”.
Sobre los delitos de violencia doméstica con destino a padres y hermanos, la Memoria revela que en el año 2023 se incoaron 4.416 causas, lo que supone un incremento del 1,94% respecto al año 2022 en el que se incoaron 4.332 asuntos, si adecuadamente es una guarismo inferior a los 5.055, 4.699 y 4.740 de los abriles 2019, 2020 y 2021, respectivamente.
Las diversas secciones tienen percepciones dispares sobre esta modalidad delictiva, pues si adecuadamente en la gran mayoría las cifras se han estabilizado, hay secciones donde las cifras repuntan como en Tenerife, Sevilla y Madrid.
Acercamiento con fines terapéuticos
La Fiscalía apunta que este tipo de delito genera “mucha preocupación porque reflejan la vitalidad hogareño, es afirmar, la vitalidad del entorno en el que el beocio se desarrolla y constituye su principal referente” por lo que considera necesario “habilitar posibles específicos de reeducación e intervención, y valorar la conveniencia de que las medidas de alejamiento permitan el acercamiento con fines terapéuticos”.
Adicionalmente, respecto a los delitos de violencia de clase, en 2023 se registraron 807 causas, lo que refleja un incremento del 11% respecto a las 727 de 2022, siendo la guarismo más adhesión de los últimos cuatro abriles.
Esta tipología penal, según indica la FGE, resulta “muy preocupante”, pues adyacente con la relativa a los delitos contra la espontaneidad sexual, “ponen de manifiesto que no están calando en nuestros jóvenes los grandes esfuerzos que se están realizando en la formación en igualdad”.
Asimismo, de los datos se desprende que en el año 2023 se han incoado 3.185 causas por delitos contra la espontaneidad sexual, frente a las 2.947 que se incoaron en 2022, representando un incremento del 8,07% y “continuando en una amenazador helicoidal, que no para de crecer”.
Según recuerda la Fiscalía, el 7 de octubre de 2022 entró en vigor la Ley Orgánica de aval integral de la espontaneidad sexual, tras lo cual desaparece la diferenciación entre el tipo penal de asalto sexual y el de extralimitación sexual, “lo que justifica que numéricamente se aprecie un incremento de delitos de asalto sexual de 149,18% en el año 2023 frente al año 2022 y que respecto a los delitos por extralimitación sexual se haya experimentado un descenso de 61,58%”.
Estos datos, según puntualiza la FGE, han de ser interpretados “con mucha cautela”, en tanto que en el género de agresiones sexuales además tienen encaje los antiguos abusos sexuales; y bajo la rótulo abusos sexuales sólo tienen cabida los hechos cometidos con antelación a la entrada en vigor de dicha ley que hayan sido denunciados durante este examen, y que integran ese tipo penal.
Sobre las razones de este incremento, la Fiscalía señala que es “generalizada” la opinión de que confluyen diversos factores, destacando una “carencia de una adecuada formación en materia ético-sexual, el consumo del pimple u otras sustancias, el paso temprano a contenidos pornográficos inadecuados sin una adecuada educación sexual y en títulos en genérico, así como la constatada banalización de las relaciones sexuales y de la intimidad en particular”, tal y como reseñan las Fiscalías de Sevilla, Proyectil, Cáceres y Madrid.
En cuanto a la violencia y acoso en el ámbito escolar, destaca el caso de Guadalajara por el incremento del 520% de casos en su provincia, pasando de 5 en el año 2022 a 31 en el año 2023.
En esta serie, la Memoria además revela un “incremento” de los delitos cometidos haciendo uso de medios telemáticos e Internet, especialmente redes sociales o aplicaciones de transporte como WhatsApp o Telegram.
Por su parte, se han corto los delitos cometidos por menores contra la vitalidad pública (posesión de sustancias), los delitos contra el patrimonio y contra el orden manifiesto.
Sobre los delitos competencia de la sección de menores de la Fiscalía de la Audiencia Franquista, la Memoria señala que en el año 2023 se han incoado 26 diligencias preliminares frente a las 8 incoadas en 2022, un “trascendental incremento de 225%”. Del total de diligencias, 19 corresponden a delitos de terrorismo de carácter yihadista.
En cuanto al número de sentencias, en 2023 se han dictado por los Juzgados de Menores un total de 14.868 sentencias, lo que refleja un descenso del 8,72% respecto a 2022 (cuando fueron 16.289). Adicionalmente, se han impuesto en 2023 un total de 20.910 medidas judiciales, un 9,73% menos respecto al año 2022 (cuando fueron 23.175).