Partido Popular (PP) y Ciudadanos (CS) no han tardado en reaccionar ante el último traspaso del Gobierno de Pedro Sánchez a las demandas de Carlos Puigdemont para apoyar su investidura. En esta ocasión ha sido el Ministerio del Interior el que ha pedido al Unión Europea (UE) que separa el concepto de independencia catalana del de terrorismo. Lo ha hecho a través de una carta, fechada el pasado martes, del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (Citco), dependiente de Interior, dirigida a la agencia Europol. En esta carta, el departamento de Fernando Grande-Marlaska solicita a la UE que elimine la relación entre ambos conceptos de su informe sobre ‘Situación y tendencias del terrorismo en la Unión Europea (Tesat 2023)’. La petición ha sido formulada sólo tres semanas después de que el expresidente catalán, prófugo de la Justicia, la incluyera en una de sus ruedas de prensa desde Bruselas como una de las exigencias para apoyar la investidura del líder socialista.
En su comparecencia ante los medios del día 5, el líder remoto de Junts afirmó que “no se puede negociar con quién, en la directiva donde se fijan objetivos de inteligencia para los cuerpos policiales, nos considera la segunda amenaza más importante detrás del terrorismo yihadista y eso pide a Europol que nos trate como terroristas.
Moncloa niega el traspaso
El Ejecutivo se ha apresurado a desmentir la relación entre ambos hechos. Fuentes de Ministerio del InteriorConsultado por Ep, explica que ya en marzo y diciembre del año pasado el Citco advirtió de este “error técnico” y precisan que no se había hecho ninguna referencia “en ningún caso” a los independentismos como terrorismo. Interior asegura que “no caben otras consideraciones” y desvincula así la veracidad de las declaraciones de Puigdemont.
“Citco nunca ha calificado a ningún independentismo como grupo terrorista”, insiste Moncloa, quien a su vez aclara que las únicas organizaciones catalogadas como terroristas por la Justicia española son ETA y Resistencia Gallega.
Aunque Interior intentó desligar las declaraciones del expresidente catalán de su gestión ante el Europol, CS considera que esta petición “corresponde a una de las condiciones que el líder independentista fugado de la Justicia, Carles Puigdemont, ha exigido a Pedro Sánchez”. Así se expresó ayer su eurodiputada Maite Pagazaurtundúa, que criticó la petición del PSOE y pidió en una carta dirigida a la directora de este organismo de la UE para la cooperación policial, Christine de Bolle, mantener el control sobre la “violencia política y el odio ideológico” del independentismo catalán. A juicio de Pagazaurtundua, el PSOE intenta “infravalorar y poner al servicio de intereses partidistas la labor profesional que desarrollan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado”. Asimismo, subraya que hay un elemento nuclear, persistente y significativo de “violencia política y odio ideológico” en el centro de la vida en Cataluña.
El PP, por su parte, también quiso denunciar esta nueva maniobra del PSOE. Fue su portavoz en el Parlamento Europeo, Dolores Montserrat, quien, en la misma línea de CS, lo calificó como “un nuevo uso partidista de las instituciones”, ya que “la única razón que lo piden es para mantenerse en el poder”. Tu compañero Javier Zarzalejos También ha lamentado esta “nueva concesión al separatismo” y el “descrédito” que supone tal petición para nuestro país, además de que podría sentar un “precedente peligroso”.