De oscuridad y con un cuchillo de cerca de 30 centímetros va rayando una fila de coches. Le bautizaron como el ‘Rambo de Barajas’. Los vecinos de este morería de Madrid vivían con conveniente hartazgo y temor las andanzas de este personaje que se dedicaba a realizar actos vandálicos de aurora. El caso dio un transformación cuando uno de esos vecinos, Javier Sanz, experimentado en ciberseguridad y propietario de un coche con cámaras, publicó en redes sociales un vídeo del delincuente actuando y pillado in fraganti por una de las cámaras de su coche. Una prueba irrefutable que fue esencia para la Policía para poner cerco a este delincuente.
Aunque a veces las fuerzas del orden no esperan a esa colaboración ciudadana. En Oakland, en California, los agentes locales han remolcado varios coches con sistemas inteligentes durante los meses de julio y agosto como posibles “testigos” de delitos. En concreto varios modelos de la marca Tesla que están equipados con el conocido como ‘Modo centinela’. La marca Tesla describe este sistema de vigilancia como “una función que le permite monitorizar las actividades cerca de del transporte cuando está estacionado y bloqueado”. La reproducción se inicia automáticamente cuando “se detecta un movimiento sospechoso” y “dependiendo de la formalidad de la amenaza”. Esto supone que los movimientos agresivos y/o los ruidos fuertes, como disparos o gritos, durante un crimen activan el modo centinela de los Tesla cercanos.
Según publica el publicación San Francisco Chronicle, un ejemplo fresco de este uso de los coche como testigos tuvo superficie en el estacionamiento de un hotel cerca del aeropuerto de Oakland, el pasado 1 de julio. Allí un hombre fue enemigo en un remolque con heridas de fuego y de armamento blanca. Pese a los esfuerzos de los equipos de emergencia, el hombre acabó falleciendo en un hospital cercano. Como parte de la investigación de este caso de homicidio, la policía localizó un Tesla que estaba estacionado frente al remolque. El propietario del Tesla era un turista canadiense y permitió que los agentes descargaran las imágenes sin usar el coche, lo que le ahorró una cita a la comisaría.
Otros casos parecidos con vehículos como posibles testigos se ha registrado en la ciudad californiana. El 13 de julio, en el extranjero de una tienda de productos de belleza, una discusión entre varias personas acabó en un tiroteo en el que una mujer de 27 abriles falleció. La policía de Oakland logró una orden de registro para remolcar tres coches cercanos a la cuadro del crimen para usar en la investigación las posibles grabaciones de los mismos. Unas semanas a posteriori, dos hombres fueron acusados de crimen. Las declaraciones de causa probable para sus valentía se referían a “imágenes de vigilancia de calidad de inscripción definición”.
Hace menos de un mes, la Policía de Oakland encontró a un hombre con una herida de bala en la individuo en el asiento trasero del Tesla de su novia. La novia, que igualmente estaba en el coche, dio a los agentes una “exposición parcial”, según la exposición jurada. Los agentes le quitaron un teléfono móvil ensangrentado que llevaba y le permitieron marcharse. Aunque los agentes no encontraron armas en el interior del Tesla, lo remolcaron como prueba, con la idea de que las cámaras del coche podrían sobrevenir imagen el crimen.
El Gran Hermano ahora va sobre ruedas y nos controla pero igualmente ayuda a la Policía a resolver sus casos.
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