El uso de lentillas requiere sus cuidados. Por ejemplo, aunque podemos comprar lentillas diarias, si optamos por unas antiparras más duraderas, tenemos que conocer cómo limpiarlas. Es la forma de que no dañen nuestros luceros y nos duren más tiempo.
Estas son algunas pautas de los expertos para quienes empiecen a utilizar lentillas:
¿Cómo ponerse las lentillas?
En primer división, es esencial que nos pongamos las lentillas adecuadamente para no causar daños en el ojo. Para hacerlo, lo primero es lavarse adecuadamente las manos. Luego, debemos poner una lente de contacto en el dedo índice con la cavidad cóncava en dirección a en lo alto. Con la otra mano, sujetamos los párpados inferior y superior para que permanezcan abiertos.
Ya solo desidia colocar la lente de contacto en el interior del ojo. Una vez hecho, es conveniente hacer unos movimientos suaves con el ojo para que la lentilla se centre adecuadamente. Tras desplegar suavemente los párpados, hay que parpadear con suavidad y luego mirar en dirección a los lados, en lo alto y debajo.
¿Cuánto tiempo se pueden soportar las lentillas?
Incluso debemos tener en cuenta que las lentillas no son de uso continuado. La recomendación es que no se utilicen más de doce horas seguidas. Y, en todo caso, que se retiren para echarse. De este modo, permitiremos que nuestros luceros descansen. Encima, para mantenerlos hidratados, conviene que utilicemos unas gotas. Nos las echaremos antiguamente de ponernos las antiparras de contacto y luego de quitárnoslas.
En cuanto a las propias antiparras, podemos comprar lentillas diarias, pero si elegimos las más duraderas, incluso tenemos que cuidarlas. En este sentido, recomendamos guardarlas en su estuche cada perplejidad con una opción líquida singular para conservarlas en consumado estado.
La aclimatación a las lentillas
Cuando empezamos a usar antiparras de contacto, es frecuente que notemos algunas pequeñas molestias. Pero hay otras que nos avisan de que poco va mal. Por ejemplo, si nos parece que tenemos un cuerpo extraño en el ojo, es que la lente de contacto está deteriorada o la hemos puesto mal. En cualquier caso, no podemos dejarla así. Lo mejor es que nos la volvamos a poner y, si la molestia continúa, vayamos a la óptica para que la revisen.
Del mismo modo, las lentillas no causan dolor. Si nos duele el ojo es que poco no está adecuadamente. Y lo mismo podemos sostener de las secreciones oculares. Si las lágrimas son amarillentas, puede ser que las lentillas defectuosas nos hayan provocado una infección. Finalmente, incluso la visión borrosa es indicio de que las antiparras de contacto tienen algún problema.
Lentillas diarias o más duraderas
Podemos comprar lentillas diarias o nominar otras mensuales e incluso más duraderas. Todas ellas son buenas y cumplen su tarea. Pero, si optamos por las primeras, tendremos la seguridad de que siempre estén en buen estado, reduciremos el peligro de infecciones y no tendremos que limpiarlas.
En conclusión, podemos comprar lentillas diarias o más duraderas. Pero, a la hora de utilizarlas, debemos seguir los consejos que hemos trillado. Es la modo de que nuestros luceros conserven su sanidad.