Un zagal conductor de 19 primaveras ha estrellado su transporte mientras conducía embriagado contra un hotel. El coche ha atravesado los muros de la instalación y ha destruido sumergido en la piscina de niño.
Los hechos han tenido zona este viernes a las 20:00 horas en Torrevieja. Tal y como han informado fuentes de la Policía Específico de Torrevieja, y recoge el medio ‘El Debate’, el conductor fue sometido a una prueba de alcoholemia. Este arrojó un resultado positivo de 1,17 mg/l en atmósfera espirado, una sigla que cuatriplica el nivel permitido.
No obstante, no ha habido heridos oportuno a que en el momento del montaña no había clientes en la zona exógeno del hotel. Siquiera el conductor recibió audiencia sanitaria.
Un montaña desata la fiesta
Este pasado mes de agosto, un turista borracho estrelló su coche contra una rotonda en Lloret de Mar sobre las 6:00 horas. Remotamente de sembrar el pánico, se desató la fiesta. La concurrencia que se encontraba en los locales más cercanos montó una fiesta más o menos del coche.
La Policía Específico de Lloret de Mar recibió la señal de alerta y se dirigió hasta el zona, donde realizaron un control de alcoholemia y un test de drogas al conductor. La primera prueba de alcoholemia se realizó en torno a las 6:30 horas, en la que dio un resultado de 0,23 mg/l de trinque en el atmósfera espirado. Sobre las 06:40 horas, el test de drogas desveló un resultado positivo en THC, la sustancia activa del cannabis.
‘Lloret Periódico’ precisó que, tras revisar las imágenes de las cámaras de seguridad, los cuerpos policiales confirmaron que el conductor circulaba a ingreso velocidad por el paseo Agustí Font. A Dios gracias, no hubo heridos
El conductor fue detenido y fue trasladado a las dependencias de los Mossos d’Esquadra en Blanes a las 15:30 horas. La Policía Específico le imputó un delito contra la seguridad del tráfico por conducir bajo los existencias del trinque y las drogas.
Una persecución policial a 200km/h
El pasado mes de julio, un conductor circuló durante 52 kilómetros bajo los existencias del trinque tras escapar de un control policial. Las autoridades habían regular arrinconar al individuo, un vecino de Peralta de 34 primaveras de perduración, para hacerle la prueba definitiva tras acontecer ofrecido positivo indiciario en trinque.
Cuando la Policía le ordenó que abandonase el transporte, este aceleró bruscamente y comenzó una huida por la N-121 y la AP-15. El conductor circuló de forma temeraria realizando adelantamientos en sarta continua, curvas y cambios de rasante.
Tras más de 50 kilómetros fue abordado por cuatro coches patrulla de la Policía Foral en el peaje de Marcilla. Una persecución que finalizó sin ningún herido. En el transporte interceptaron varias latas de cerveza y el conductor fue detenido por delitos de conducción temeraria, hacerlo bajo los existencias de bebidas alcohólicas, resistor bajo y desobediencia a la autoridad.
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