Borrón y cuenta nueva. Cambio de fondo y de formas. Poco más de un mes luego de su nominación como consejera de Sanidad y Consumo en sustitución de Catalina García, la nueva titular del radio, Rocío Hernández, se estrenó en uno de los escenarios más complejos que tiene una cartera que lleva ya varias legislaturas como la más compleja y la que conlleva un maduro desgaste de todo el Gobierno autonómico. Lo hizo con la intención de poner el contador a cero en cuanto al recuento de su papeleo y sus relaciones con los grupos políticos como ya hizo en su primera reunión con los sindicatos.
El presidente andaluz, Juanma Atezado, se vio obligado a hacer una crisis de gobierno en julio, pese a su poca disposición a los cambios, en buena medida por la deriva que llevaba la sanidad en esta sesión con listas de prórroga elevadas y con unas relaciones prácticamente rotas con las centrales sindicales y buena parte de los colegios profesionales. Catalina García dejó la consejería y la sustituyó una doctora doble en pediatría con un perfil técnico que en su primera convocatoria en el Parlamento llegó a afirmar «que no estaba por ningún partido político»
Ese fue el entorno con el que Rocío Hernández planteó los ejes del cambio profundo que pretende acometer y que en buena medida define una corrección con la etapa preliminar: «Tenemos tres líneas estratégicas: mejorar la atención sanitaria dando respuesta a la nueva sinceridad de la población con más envejecimiento y menos demografía; recuperar la confianza de la población en el servicio conocido de salubridad y que los profesionales sanitarios se sientan valorados, reconocidos y cuidados». Son los ejes que ya han presidido las reuniones que la consejera ha mantenido en las últimas semanas con sindicatos y colegios profesionales.
En esta diámetro, la consejera de Sanidad tendió la mano a los grupos políticos de la competición a quienes ofreció «diálogo, transparencia y trabajo» y a quienes pidió un entorno de colaboración con el objetivo de cuidar a los profesionales: «Debemos salir a consensos y que la salubridad esté por encima de todos» En el ecuador de la sesión, para una consejera de un radio de tanta relevancia como la sanitaria, no existen los clásicos 100 días de cortesía por parte de los grupos de la competición, que arremetieron con dureza por el cambio realizado en el gobierno y por el comienzo de la contemporáneo titular del radio durante este verano.
Virus del Nilo y plan de verano
El primer hito de la papeleo de la nueva consejera de Sanidad está siendo el virus del Nilo. Todos los grupos de la competición habían solicitado una comparecencia en comisión y habían cuestionado el papel de la compañía autonómica en una crisis que ha causado ya siete fallecimientos. La comparecencia, sin incautación, se vio aplazada entre quejas de la competición y pasó finalmente al próximo Pleno en el que la consejera tendrá que comparecer. La consejera, sin incautación, sí realizó un adelanto de los planteamientos de su próxima convocatoria y se refirió en repetidas ocasiones a las personas que han tenido que ser hospitalizadas o que han fallecido.
En paralelo, la consejera ha tenido que tramitar un plan de verano que heredó de su antecesora y que defendió en el Parlamento entre críticas de la competición. Rocío Hernández incidió en que el sistema había funcionado con «normalidad, sin desbordamientos, y según lo previsto» durante este verano. Admitió «demoras» pero las atribuyó a los problemas normales de unos meses en los que no está operativa toda la plantilla y al dita estructural de más de 500 profesionales que tiene Andalucía.
Los datos puestos encima de la mesa por parte de la Consejería reflejan que en el mes de julio han aumentado las atenciones sanitarias y las intervenciones quirúrgicas aunque han descendido las urgencias. Según las cifras difundidas, se atendieron 3,1 millones de consultas de medicina de comunidad (33 por profesional) lo que supone un 15% más. Además aumentaron las consultas de pediatría (4,9% más) o la botiquín (10,8% más que el año preliminar). En cuanto a las intervenciones quirúrgicas julio se cerró con un aumento del 9,2% hasta salir a 27.800 En cambio en el caso de las urgencias, se produjo una caída del 3,6% en las atenciones realizadas, descenso que la consejera atribuyó a una reducción de las patologías o a una maduro capacidad de respuesta en las consultas ordinarias.