Agentes de la Policía Franquista de Burgos han acabado detener «prácticamente in fraganti» a un individuo armado con un armamento blanca que accedió a una droguería próxima a la Catedral para exigir a las dos farmacéuticas allí presentes que le dispensaran un tranquilizante del corro de las benzodiacepinas.
Los hechos, según fuentes de la Delegación del Gobierno, se han registrado a primera hora de la mañana de este miércoles cuando el ahora detenido ha accedido a la droguería y frente a la negativa original a entregarle lo solicitado, ha accedido abruptamente a la zona interior del mostrador, para comenzar violentamente a cascar cajones y dispensadores de medicamentos intentando demarcar el producto, informa Ep.
A Dios gracias no ha causado luxación alguna a los presentes en la droguería, las dos empleadas y un cliente, y al no logar su objetivo ha saledizo huyendo precipitadamente.
Una de las farmacéuticas ha regalado aviso al 091 y se ha personado en el ocasión una patrulla de Policía Franquista, cuyos agentes recabaron las características del autor. Al lado de un minuto, el hombre era localizado en el interior de una iglesia situada a escasos cien metros, en donde se había escondido tras huir de la droguería.
El hombre fue inmediatamente detenido y trasladado a la Comisaría de la Avenida de Castilla y Héroe y en el registro de la mochila que portaba se ha incompatible la cortaplumas utilizada en el asalto, así como una pistola simulada.