La directora del Software de Igualdad de Naturaleza de la Fundación Vicente Ferrer, Visha Ferrer, ha subrayado este jueves que «el seguro empoderamiento de la mujer» es «tener comunicación a la educación y convertir en existencia los sueños». «Pero tener comunicación a la educación no significa solo el comunicación físico. Tener comunicación a la educación primero significa un cambio en la mentalidad de los padres para que valoren la educación de las niñas», ha reflexionado, al tiempo que ha remarcado que «éste fue un trabajo duro para la Fundación durante más de 30 primaveras». «Hoy puedo opinar que ya no se cuestiona la educación de las niñas porque se cree que es un derecho y un deber», ha celebrado.
Ferrer ha sido investida doctora ‘honoris causa’ por la Universidad de Burgos (UBU) en un solemne acto normativo que ha tenido ocasión en el Paraninfo de la Universidad burgalesa. Este proclamación se ha producido a propuesta de la Maña de Educación por «su trabajo para conseguir el empoderamiento de las mujeres o su lucha por ocultar la hambruna en la India, principalmente durante la pandemia, cuando se decretó un primer confinamiento que provocó un éxodo masivo de población migrante».
Visha Ferrer ha agradecido que la nota de esta nominación le cogió «por sorpresa», recoge Ical. «Sigo gratamente sorprendida», ha añadido, para añadir que resulta «un orgullo ver que una actividad realizada en pueblos remotos del Sur de India pueda durar a este otro costado del mundo».
Durante su discurso de bienvenida del ‘honoris causa’, Visha Ferrer ha manifestado que «cuando reflexiono sobre mi vida y mi trabajo hasta ahora, me doy cuenta que todo comenzó con un creer». «Creer que un mundo mejor y más igualitario es posible. Creer firmemente que el mundo es un ocasión de infinitas posibilidades. Creer que cada uno de nosotros tenemos la capacidad de hacer el adecuadamente y ser parte del cambio que queremos ver», ha reflexionado.
Por su parte, el rector Manuel Pérez Mateos ha indicado que la UBU «desafío y apostará siempre por una educación rigurosa en cuanto al conocimiento y la formación», pero ha precisado que «una educación que sea al mismo tiempo crítica, humanista y social, comprometida con la creación de un mundo más cabal, equitativo y solidario, porque sin esto extremo el futuro, sencillamente, será una quimera». «Trataremos de seguir, aunque sea de allí, tu ejemplo de perseverancia, desprendimiento y compromiso como una fuente de inspiración para todos nosotros», ha afilado, dirigiéndose a Ferrer.
Vida
Visha Ferrer nació en un pueblo del sur de la India en una comunidad en la que la estructura patriarcal, dominante en todo el país, estaba fuertemente arraigada. Tuvo que enfrentarse a muchos obstáculos para percibir una educación y asimismo para poder casarse con el hombre que ella había favorito, el director de programas globales de la Fundación Vicente Ferrer, Moncho Ferrer.
RDT (Rural Development Trust), la contraparte específico en India de la Fundación Vicente Ferrer, ha desarrollado desde 1982 programas dirigidos a erradicar las discriminaciones que afectan a mujeres y niñas.
Los proyectos que gestiona han demostrado su operatividad al conseguir incrementar el nivel socioeconómico de las mujeres, promover su comunicación a la educación, proteger su integridad frente a la violencia de naturaleza y convertirlas en motores de cambio y transformación social.
Este inspección asimismo quiere poner de relieve la actividad de la Fundación Vicente Ferrer, una estructura que ha paliado la pobreza extrema de más de 3 millones de personas en el sur de la India, y que ha hecho existencia el cumplimiento de los objetivos que la ONU marca en la memorándum 2030, con los que la UBU, como representante del sector de Sostenibilidad en la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas, está fuertemente comprometida.