El gasto de agua para usos agrícolas sitúa a Pontedeva en riesgo de cortes


El riego de huertas y el cuidado de los viñedos está llevando al frontera los manantiales de Pontedeva. El Concello que preside Juan Carlos González pedía ayer “un postrero esforzo” a los vecinos para tratar de frenar el consumo de agua, limitando su uso exclusivamente al ámbito doméstico en las zonas de Lugar y Senra, dados los bajos niveles que presentan los tanques. “Están al frontera. Septiembre es el peor mes, siempre. Los manantiales empiezan a resentirse, bajan, pero el consumo no; porque hay huertos, viñedos, viene la vendimia y hay que preparar las cubas”, describía el corregidor de este pequeño concello de Terra de Celanova, en el frontera con O Ribeiro, quien rechazaba pluralizar sobre el derroche, pero enfatizando que “si el agua de la red solo se utilizase para consumo doméstico, no tendríamos estos problemas”.

Si la situación no alivio, y no se logra recuperar los niveles mínimos en los tanques, “procederemos al corte del suministro de merienda de la sombra a siete de la mañana”, advertía el regidor, quien reconocía que “eso nos dará trabajo al tener que ir a todos los manantiales”, dijo.

Este municipio con 468 habitantes (según el Instituto Franquista de Estadística) se abastece por una red compuesta por cinco traídas -y 19 manantiales– que hace ahora cinco abriles los vecinos cedieron al Concello para su administración, a cambio de una aplicación estrecha del recibo. “A día de hoy, los vecinos no están pagando por el consumo porque todavía está en tramitación todo el proceso de refrendo”, reconocía González Carbajales. Poco que dilación realizar en breve, una vez que se materialice igualmente la instalación de los nuevos contadores digitales que llevará a parte la Diputación de Ourense.

Una alivio tecnológica que se suma al estudio geográfico para uniformar la red que llevó a parte el Concello en 2019 y que le permitió conocer al detalle cada una de las redes y los rudimentos que las integran desde los manantiales hasta la red de tuberías, pasando por los depósitos, registros, válvulas o edificaciones.

Las cifras

Estas son las cifras que ilustran la situación de Pontedeva.

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Reforma de la red

Basándose en este estudio, el agrupación de gobierno municipal tiene en marcha un plan de intervención de la red que pasa, inicialmente, por la creación de tres nuevos pozos que ayuden a mitigar la desliz de agua a final del verano. “Estamos pendientes de la resolución de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil para la construcción de tres pozos de emergencia en los lugares de A Senra, Xinzo y Freáns, donde más problemas tenemos”, reconocía González Carbajales, quien señalaba que lleva dos abriles esperando el manido bueno del organismo de cuenca para la ejecución de una obra que ya cuenta con una subvención de 40.000 euros de la Diputación provincial de Ourense.

Los nuevos pozos no son la única opción para la alivio del servicio que, actualmente, el Concello presta a unas 200 edificaciones en todo el municipio. La red, con una extensión que suma 19,86 kilómetros de tuberías, presenta fugas y pérdidas en varios tramos y es una prioridad acometer su renovación. “Ahora mismo están los redactores a pie de campo para tolerar a parte la redacción de ese tesina para la renovación de la red en los lugares de Lugar, A Senra y Freáns, que es donde más problemas hay”, reconocía el regidor, haciendo referencia a la decadencia de las canalizaciones. “Por el momento, desconocemos el coste total, pero una vez redactados los presentaremos a Augas de Galicia”, dijo buscando el apoyo crematístico de la Xunta de Galicia.

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