La Policía Doméstico ha detenido en Alicante a una mujer por denunciar falsamente un robo con violencia, en el que narró que fue asaltada por un fresco cuando iba a entrar en su casa tras retornar de copas, robándole este su documentación y 300 euros. Los agentes investigadores desmontaron su lectura y descubrieron que estaba involucrada en otros presuntos delitos de estafa.
Las pesquisas arrancaron tras cobrar la denuncia de la víctima que indicaba que había sido asaltada por un macho cuando iba a consentir a su domicilio. En su evidencia manifestó ocurrir sido víctima de un robo violento que había ocurrido de alborada en el distrito alicantino de Los Ángeles.
Según denunció la asaltada, el día mencionado del supuesto robo, había sacado 300 euros de un cajero, los cuales guardó en un bolsito. Además señaló que el día de los falsos hechos, había estado consumiendo bebidas alcohólicas en un establecimiento hostelero y a altas horas de la sombra volvió a su casa.
De acuerdo con su lectura, fue al entrar al portal de su vivienda cuando, de forma sorpresiva, un fresco le introdujo la mano en el bolsa donde llevaba el billete y su documentación, comenzando un forcejeo hasta que este fresco consiguió arrebatarle sus pertenencias. Finalmente el autor consiguió huir a la carrera.
Días posteriores, la falsa víctima volvió a presentarse en comisaría para aportar más información del asunto. «Muy nerviosa y en medio de sollozos indicó no acordarse proporcionadamente de lo ocurrido», ya que había ingerido gran cantidad de pimple. No obstante, mantuvo «sin ningún especie de dudas» que los hechos habían ocurrido tal y como había manifiesto en su primera denuncia.
El bar no había franco
Los investigadores realizaron diferentes diligencias investigativas descubriendo que las manifestaciones de la supuesta víctima eran falsas. Consiguieron enterarse que el día que ocurrieron los supuestos hechos, el bar dónde dijo ocurrir estado, no había franco y, adicionalmente la denunciante siquiera había pasado por el camino que dijo ocurrir tomado para retornar a su casa.
Cuando los agentes profundizaron más en la investigación, se pudo enterarse que había más hechos delictivos relacionados con esta simulación de delito. Al parecer, habían donado de reincorporación una cuenta bancaria a nombre de la autora de la simulación, usando el supuesto DNI que le habían sustraído durante el robo con violencia.
Con esa nueva cuenta, se habían realizado varios movimientos de billete que ascendían a un total de 19.800 euros. En alguno de ellos la beneficiaria parecía ser la propia denunciante de los falsos hechos. Estos delitos ya estaban siendo investigados por otra pelotón especializada de la Policía Doméstico.
La presunta autora fue detenida en la ciudad de Alicante, imputándole el delito de simulación de delito por ahora. De esta modo se consiguió esclarecer estos primeros hechos y se descubrió que el asunto estaba relacionado con varias estafas que se estaban investigando. La arrestada, una mujer española de 44 primaveras, carecía de referencias. Las diligencias fueron tramitadas y enviadas al Auditoría de Instrucción de Cuidado de la ciudad de Alicante.
Simulación de un delito
La Policía Doméstico informa que una simulación de delito es aquella denuncia en la que se finge ocurrir sido responsable o víctima de un hecho delictivo inexistente, sin mostrar a una determinada persona.
Este tipo de delitos suelen ser cometidos por personas que quieren ocultar la vergüenza de ocurrir perdido algún objeto por descuido. Además se da cuando el denunciante quiere cobrar algún tipo de seguro del objeto perdido o sustraído.
Los autores son frecuentemente personas sin referencias, que no suelen ocurrir tenido problemas con la conciencia y que desconocen que disimular un delito está tipificado en el código penal como delito.