Rubén Baraja, monitor del Valencia, ha explicado en rueda de prensa la consentimiento que el club ché ha impuesto a Rafa Mir, investigado por una denuncia de embestida sexual: “Cuando sucede el episodio de Rafa el club tiene que valorar qué osadía tomar, es una osadía en la que no puedo participar porque mi cometido es el ámbito deportivo. Una vez que el club le readmite, entro en argumento yo para valorar las consencuencias”.
“A partir de ahí se toma la osadía de que esté fuera del equipo dos partidos; esta semana está entrenando a parte y la semana que viene se irá reincorporando con el conjunto. Una vez que pasen esos dos partidos de consentimiento deportiva, formará del conjunto como una más y ahí yo decidiré si juega o no. Es muy difícil tomar una osadía salómica que le pueda cautivar a todo el mundo, pero hemos intentado hacer las cosas con sentido global”, explica el técnico.
“Como monitor, me parece que un acto de indisciplina tiene que tener unas consecuencias”
Cuenta Baraja que Rafa Mir pidió perdón al equipo y que merece otra oportunidad: “Él en el primer momento se disculpa con la plantilla y dice que su forma de hacer no ha sido la adecuada y acepta el castigo impuesto. Como monitor, me parece que un acto de indisciplina tiene que tener unas consecuencias, no solamente por él sino por la vigor del conjunto. Una persona se puede confundirse y tener un día que no haga las cosas adecuadamente y lógicamente tenemos que darle una segundad oportunidad”.
El preparador de Valladolid además ha valorado las duras palabras de Pepelu sobre su compañero: “Pepelu es una voz autorizada internamente del vestuario, es uno de nuestros capitanes. Suscribo 100% su opinión porque es el observar del vestuario, hay determinadas cosas que no se pueden hacer. Ya no solamente por la situación deportiva, porque el equipo no ha arrancado adecuadamente, sino porque tenemos que tener unos mínimos profesionales y no podemos permitir este tipo de cosas”.
Desilusionado
“El vestuario además sabe que Rafa Mir es un participante que podemos precisar durante la temporada y además entiende su perdón, dándole la posibilidad de ser uno más. Es evidente que hay una gran frustración por mi parte, porque tengo que admitir que yo valoré que Rafa nos podía dar soluciones en ataque. Así se lo he transmitido: para mí ha sido una gran frustración, pero espero que le haya servido para memorizar y valorar el club en el que está y lo importante que es aquí hacer las cosas adecuadamente por lo menos mientras yo esté”, reflexiona el Pipo.
Baraja además se ha referido a la presunción de inocencia de su futbolista: “Es verdad que yo creo en las personas y hay que darle la posibilidad de que volvamos a tener fe en él”.
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