“Sobre las 12 del martes empezó La Eliminación de las Galaxias”. Con arte gaditano, Juan Carlos, el director del bar La Morrua, cuenta a Antena3 Informativo, cómo comenzó el corte de luz en un edificio de la Mancomunidad La Aguaducho en San Fernando. “Parecía una nave espacial, las luces se encendían y se apagaban solas. Tenemos el cuadro fuera y sentíamos las explosiones”, recuerda.
Rafael, uno de los vecinos, explica que “las ratas primero se comieron el neutro, por lo que entraron 400 voltios a las viviendas. Los electrodomésticos y las luces empezaron a hacer cosas raras”. Patricia Martínez, la presidenta del sillar afectado, detalla que del decodificador de la antena y de una puerta corredera eléctrica comenzó a salir humo.
Las pérdidas que ha provocado entre los vecinos esta subida de tensión y el posterior corte de luz han sido cuantiosas. “Yo he tenido suerte, pero hay vecinos que han perdido el frigorífico, congelador, salero acondicionado, el lavavajillas… vamos, electrodomésticos de los grandes”, describe este vecino.
“Nosotros tuvimos que cerrar, 24 horas sin trabajar. Varios focos y la máquina de tabaco se han estropeado”, enumera el director del bar. Los nueve vecinos de este sillar de San Fernando en Cádiz se han conocido afectados en anciano o pequeño medida.
Rafael explica a torrevieja news today Informativo que es la tercera vez que las ratas inutilizan los cables de las viviendas, que en las dos anteriores afectaron a la acometida genérico pero que en esta ocasión dejaron inservibles las del interior del sillar: “El seguro de la comunidad no cubre los desperfectos por mordedura de ratas, ahora cada vecino tendrá que verlo con su seguro particular”.
“3.000 euros ha costado poner el cableado nuevo y el seguro no se hace cargo. Menos mal que no ha ocurrido ausencia solemne como un incendio porque ¿quién se haría responsable?”, se pregunta la presidenta de la comunidad.
Algunos vecinos tuvieron que advenir la tenebrosidad fuera. “Se habían comido todos los cables menos uno. Eran las nueve de la tenebrosidad y ya sabíamos que íbamos a advenir la tenebrosidad sin luz y que la reparación iba a tardar. Adicionalmente, algunos de los vecinos son mayores”, comenta Patricia.
Plaga de ratas en la zona
Tienen numerosas fotos con los cables totalmente roídos y otra en la que han inmortalizado a una de las ratas electrocutada. No hay duda de quiénes son las culpables. “Les errata la mochila y el sombrero”, bromea Juan Carlos del bar La Morrua. “Hoy he conocido unas cuatro o cinco dando una envés por la barrio”, confirma el hostelero.
“No han llegado a entrar en las viviendas, pero sí que hay muchas por la zona, por los jardines” comenta Rafael, vecino de El Molino: “Estamos indignados, deberían desratizar, cada vez hay más”.
“Las arquetas en las que están los cables estaban llenas de arena, los técnicos nos comentaron que eso es porque las ratas excavan y la desprenden”, comenta Patricia. Todos coinciden en la pobreza de que la zona sea desratizada lo ayer posible para que no vuelvan a sufrir otro episodio similar.
