una mezcla entre aciertos e incógnitas


Hasta diez incorporaciones realizó el Córdoba en el pasado mercado de fichajes. No todos han funcionado de la misma forma en las cinco primeras jornadas. Algunos todavía no han conseguido hacerse un hueco en el merienda de Iván Ania. Otros han aterrizado de pie en el equipo aunque todavía hay beneficio de perfeccionamiento para sacar su mejor lectura, pues para muchos esta es su primera experiencia en el fútbol profesional. Sin incautación, las buenas sensaciones de los últimos partidos invitan al optimismo entre la apego blanquiverde.

En la meta, el Córdoba apostó por un zagal portero de futuro. Ramón Vila aterrizó en el equipo para pelear por la titularidad a Carlos Marín. No será tarea viable pues el capitán blanquiverde está arrancando la temporada con mucha fuerza y su papel es esencial en el ámbito de surtido. Vila todavía no ha debutado con la blanquiverde aunque es «un sueño» para él. Por oto costado, en el eje de la retaguardia, el club igualmente apostó por lozanía con la arribada de Xavi Sintes. El central todavía tiene que acoplarse tras un brinco de dos categoría (viene de Segunda RFEF). Casi nada ha tenido minutos como central y en el centro del campo. No ha conseguido deslumbrar.

El central que sí ha aterrizado con buen pie en el equipo es Marvel. Fue el zaguero fichaje del equipo y con pocas sesiones de entrenamiento, se hizo con la titularidad. Adyacente a Lapeña, ha conseguido reforzar la defensa blanquiverde, que ha mejorado notablemente en las dos últimas jornadas. Sin duda, uno de los mejores movimientos del cuadro blanquiverde este verano, cuando se hizo con su cesión por parte del Verdadero Madrid. El contiguo Carlos Isaac, aunque no ha tenido muchos minutos, sí tiene potencial para demostrar con la blanquiverde. Desde el banquillo, ha dejado buena impresión y la próxima semana tendrá la oportunidad de sentar a Carlos Albarrán.

Sin brinco de calidad

La medular, sin incautación, todavía no ha cubo ese brinco de calidad que se esperaba y el centro del campo está liderado por los jugadores de la temporada pasada: Isma Ruiz y Álex Sala. Los nuevos fichajes (Théo Zidane y Genaro) aún no han conseguido hacerse con un hueco en el merienda fijo aunque el francés está ganándose poco a poco la confianza de Iván Ania. Ha jugado como pivote y como enganche, en la mediapunta. Genaro, por su parte, no ha convencido en los minutos que ha tenido. Tuvo la oportunidad de ser titular, pero está un escalón por debajo del resto.

Para la parcela ataque se sumaron Jacobo y Yoldi. Dos jugadores polivalentes que pueden brincar en todas las zonas de ataque. Los dos han tenido un buen manifestación de combinación aunque con caminos inversos. Jacobo empezó muy aceptablemente la temporada y está llamado a ser un ludópata diferencial, dada su calidad. Sin incautación, ha estado más desaparecido en los últimos encuentros. Todo lo contrario que Ander Yoldi que, poco a poco, está ganando protagonismo e incluso lleva dos goles, los mismos que el Pichichi del clase, el rambleño Antonio Casas.

Jude Soonsup-Bell fue el fichaje más arriesgado del club blanquiverde este verano. Un ludópata inglés, sin experiencia más allá de la combinación de reservas con el Tottenham. Ha jugado escasamente 20 minutos con la blanquiverde y todavía tiene mucho beneficio de perfeccionamiento. Le costó mucho compenetrarse con sus compañeros y se le vio desubicado en el ámbito de surtido. Hay expectativas puestas en el zagal ludópata, que necesita exceder la barrera del idioma y aclimatarse a su nuevo equipo. Su polivalencia le puede dar un brinco al equipo en la zona de ataque, donde necesita toda la pólvora.

Por zaguero, a la delantera llegó Obolskii para formar pareja de puntas con Antonio Casas. Tuvo la titularidad en la primera excursión de combinación, pero luego su papel ha ido menguando hasta ser un ludópata para los últimos minutos. Le está costando recuperar la mejor lectura de la temporada pasada y no ha conseguido estrenarse como goleador, pese a tener ocasiones claras. Necesita tiempo para demostrar que su fichaje no ha sido un error. El ruso tiene potencial, pero no se ha manada todavía la confianza plena de Iván Ania. De momento, el papel de punta lo mantiene Antonio Casas, que ha sido fijo en las cinco primeras jornadas de combinación.

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