La inmigración se ha colocado como primer problema franquista según el Barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) correspondiente al mes de septiembre, en el que se anota el doble de menciones que en julio, pasando del un 16,9% a un 30,4%, lo que la coloca por delante de los problemas políticos y del paro, y en unos registros que no se veían desde 2007, tras la conocida como ‘crisis de los cayucos’.
En tan solo tres meses, la preocupación por la inmigración ha crecido notablemente entre la población española, pasando de ser la octava inquietud a acomodarse la primera posición en tan pronto como 90 días.
Según este estudio, presentado este miércoles con entrevistas realizadas a principios de mes, el segundo problema de España son los problemas políticos, con un 20,6% similar al de la pesquisa precedente, mientras que la tercera plaza la ocupa el paro, que cae seis puntos y se queda en el 20,1%.
La citada pesquisa está basada en entrevista a 4.027 personas realizadas entre el 2 y el 6 de septiembre. Adicionalmente, entre las preocupaciones de los españoles en dicha publicación incluso se resalta el tema de la vivienda, los problemas relacionados con la calidad de empleo o la sanidad.
No es el primer problema personal
En la pesquisa publicada por el CIS incluso se deja atisbar que la inmigración muerto numerosos escalones en cuanto a la preocupaciones personales de los españoles. A pesar de que es la primera a nivel común, otros como el tema político, la hacienda o la vivienda toman fuerza.
La crisis económica, con un 30,2%, lidera las principales preocupaciones personales de los españoles. En segundo espacio, aparece la sanidad con un 17,1%. Cerrando el podio, emergen los problemas relacionados con la calidad del empleo.
La vivienda es la cuarta preocupación y la inmigración aparece en el botellín puesto con un 13,7%. Es aseverar, está considerado como un problema más genérico para los españoles y afecta menos al tema personal de cada uno en el día a día.