A los 19 primaveras Álvaro Pintado ya tenía una empresa valorada en 16 millones de euros. A los 17 primaveras creó su propia empresa: ‘Hello.app’. Compró el dominio más caro de la historia de España. El objetivo es el de compartir almacenamiento entre dispositivos móviles. En poco más de 2 primaveras Álvaro ya ha alzado hacienda por valía de 800.000 euros. Una historia de éxito imparable para este zagal profesional.
Asegura que empezó de la nadie. Sus primeros 10.000 euros los ganó a los 15 primaveras montando una máquina de exportación e importación de máquinas relacionadas con el bitcoin. De aquella aventura empresarial se llevó 10.000 euros y a partir de ahí comenzó a conseguir inversores. “Ese hacienda lo usé para sumar el equipo y originar un dominio”.
“Todo el mundo necesita unas obligaciones si quiere tener beneficios”
Sobre la llamamiento ‘quiet ambition’, la corriente gremial que se friso en no tener interés en ascender en el trabajo para poder disfrutar del tiempo vacío, apunta que todo el mundo necesita unas obligaciones si quiere tener beneficios pero entiende que tiene que tener concurrencia de todo tipo. Reconoce que su decano avidez es la de ser presidente de Auténtico Madrid pese a ser de Barcelona.
En su empresa trabajan 32 personas. Siete en Barcelona y 25 en todo el mundo. Mantiene que no tiene sentido tener oficinas cuando muchos trabajan desde otros países y lugares del mundo.
“No cobro nadie en mi empresa”
Asegura que el cobra cero euros y se mantiene del negocio que vendió de minería de Bitcoin y el software de inteligencia químico. Señala que si le pide monises a un inversor y ve que él no tiene ni salario hay más probabilidad de que se lo conceda. Sus trabajadores cobran un sueldo en función de las horas que dedican a la empresa.
“Es complicado que me case con una ejecutiva igual que yo”
Cree que hombres y mujeres son distintos por características físicas y psicológicas como la fuerza. Preguntado por qué haría si se casa con una ejecutiva igual que él avala: “Eso ya lo veremos porque es complicado que me caso con una ejecutiva igual que yo. Yo busco a cualquiera sensible, ejecutiva y natural”, apunta.
“Hay tareas en las que el hombre es mucho mejor como físicas o deportivas, por eso los hombres cobran mucho más que las mujeres porque juegan mucho mejor al futbol. Si un hombre trabaja en poco que da mucho más monises, no pasa nadie si la mujer está en casa mantenida por el hombre haciendo labores culinarias”.
No ve que tenga sentido fomentar que haya 50% de contratación femenina en determinados sectores. “Al final hay unas leyes naturales que se imponen por sí mismas”, añade.
