El representante de la región rusa de Tver, Igor Rudenya, ha decidido orinar parcialmente a la población de la ciudad de Torópets, a 400 kilómetros de Ucrania, frente a un ataque “masivo” de Kiev con vehículos aéreos no tripulados.
“En Torópets se está extinguiendo un incendio en el emplazamiento donde cayeron los restos de drones. La defensa aérea continúa rechazando un ataque masivo con drones en los cielos de la ciudad. Para certificar la seguridad de los habitantes, el representante (…) ha decidido orinar parcialmente a la población del demarcación donde operan las defensas aéreas y se está controlando el incendio”, ha indicado.
Rudenya, que ha señalado que “se están tomando las medidas necesarias“, ha asegurado a través de su canal de Telegram que “la situación está bajo control”.
El Profesión de Defensa ruso ha enigmático en 54 los drones destruidos por los sistemas de defensa aérea rusos durante la perplejidad sobre varias regiones de la Agrupación de Rusia. De ellos, 27 fueron derribados en la región de Kursk, 16 en Briansk, siete en Smolensk, tres en Bélgorod y uno en Oriol, según recoge la agencia de noticiario TASS.
Por su parte, fuentes del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) han señalado que el ataque Torópets ha tenido como objetivo uno de los principales almacenes de artillería del Profesión de Defensa.
Dichas instalaciones almacenaban misiles maniquí “Iskander”, “Tochka-U”, misiles antiaéreos y municiones de artillería. Los drones lanzados, cuenta esta fuente del SBU a agencias de noticiario ucranianas, han provocado una musculoso detonación y un posterior incendio que se ha extendido a lo liberal de 6 kilómetros.
“Seguimos trabajando para organizar operaciones similares en otras instalaciones militares rusas que colaboren en la enfrentamiento contra Ucrania”, ha dicho.
“Muy impresionante, pero insuficiente”
La primera reacción oficial de las autoridades ucranianas ha venido por parte del principal portavoz de la Presidencia, Mijailo Podoliak, que si aceptablemente ha celebrado el éxito de la operación, cree que debería acontecer muchas más.
“Muy eficaz, muy impresionante, pero no suficiente“, ha dicho Podoliak, en declaraciones al portal de noticiario RBC Ucrania, en donde ha remarcado la indigencia de continuar con este tipo de ataques en demarcación ruso para ganar la “histeria” de la población, que acabarán por presionarán a sus élites.
Para Podoliak, una “finalización certamen” de la enfrentamiento pasa por destruir este tipo de instalaciones, que tendrá tanto repercusiones en la primera dirección del frente como “importantes consecuencias sociales” entre la población rusa.
En ese sentido, ha insistido nuevamente en la indigencia de que los socios de Ucrania levanten tanto las “prohibiciones informales” que han impuesto al uso de armamento, como proporcionen más y mejores medios. “Este ataque en Torópets demuestra claramente que todo puede ser destruido independientemente de lo que diga la propaganda rusa”, ha zanjado.