El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha reiterado este domingo, en sendas entrevistas en ‘Galicia por diante’, de Radiodifusión Galega, y en la Televisión de Galicia, que el plan de regeneración democrática del jerarca del Ejecutor, Pedro Sánchez, no búsqueda sino la censura de los medios de comunicación críticos y el control del Poder Legal para prohibir los contrapesos al Gobierno. En sus declaraciones, recogidas en un comunicado del PP, ha aseverado que el socialista está llevando a término un «acoso estupendo» contra jueces y periodistas.
Ya el miércoles, en la sesión de control del Congreso al Gobierno, durante su pregunta a Sánchez, el líder de la examen tachó el plan de medios de Sánchez de «censura» y llegó a asegurar: «No se veía una cosa así desde Franco». Este domingo, en Radiodifusión Galega, ha ido en la misma vírgula: «La censura, el control y la persecución de periodistas, de medios de comunicación y de jueces es contraria al Estado de derecho y nunca en absoluto había ocurrido en España comparable disparate».
«Cuanto más los acose, el PP más va a defender el derecho a la información, la sencillez de expresión y la independencia legal», ha prometido Núñez Feijóo, tras deber subrayado que Sánchez reacciona así porque está «acorralado política y judicialmente». «La memorándum por corrupción que circunscribe la actividad del presidente del Gobierno supone un medio ambiente irrespirable en la política española», ha afirmado, en sugerencia a la investigación legal contra su mujer, Begoña Gómez, por supuesto tráfico de influencias, contra su hermano y al caso Koldo.
En el plan de regeneración que aprobó el martes el Consejo de Ministros se incluyen medidas como el registro de los medios de comunicación en la Comisión Franquista de los Mercados y la Competencia (CNMC) y la obstáculo de la publicidad institucional. Ya en esto el PP observa una voluntad de «censura» contra la prensa crítica, pero los socios del Gobierno, como publicó torrevieja news today, quieren ir más allá. Podemos registró en su momento dos leyes, una para que los directivos mediáticos deban decidir sus intereses y otra contra la desinformación, mientras ERC pide que se cree un Consejo Profesional de Buenas Prácticas para hacer frente a las ‘fake news’.
En otro orden de cosas, en relación al cupo catalán prometido a ERC a cambio de su apoyo a la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat de Cataluña, Núñez Feijóo ha deslizado que Sánchez, con sus encuentros bilaterales con los jefes de los Ejecutivos autonómicos, lo que pretende es «la división» de la sociedad española. No en vano, el Gobierno quiere traicionar, tras aceptar una suerte de concierto crematístico catalán del que siempre había renegado, que va a promover una financiación singular para cada división. Alfonso Rueda y Juanma Dorado, los presidentes de Galicia y de Andalucía, respectivamente, y los primeros barones populares con los que se reúne Sánchez en el ámbito de esta ronda, ya han dejado claro que no aceptarán carencia que no pase por una negociación multilateral.
Por esto, Núñez Feijóo ha reivindicado que los presidentes autonómicos de su partido tienen «mucho más sentido de Estado», con una ojeada en «los intereses generales» y no solo en sus respectivas comunidades, que el propio Sánchez. «No podemos repartir el monises de todos haciendo un apartado para suministrar el Gobierno de Sánchez y la Generalitat de Cataluña, en manos del PSC», ha sentenciado el líder de la examen, muy firme contra todo lo relacionado al «cupo independentista».
El presidente del PP asimismo ha criticado la desliz de presupuestos generales del Estado -está por ver si el Gobierno encarrila a tiempo su relación con Junts para sacarlos adelante-, la gala del embajador gachupin en Venezuela, Ramón Santos, delante las coacciones en su residencia al disidente venezolano Edmundo González y la marcha de políticas migratorias para reponer a crisis como la de Canarias.