El desencuentro entre el corregidor de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, y los agentes de la Policía Restringido se dejó notar de nuevo ayer domingo. Tras un turno de indeterminación en el que volvieron a estar solo un agente en el puesto telefónico y otro de servicio, se esperaba para ayer que a los 10 agentes a los que correspondía el turno de mañana los reforzaran al menos 20 compañeros de forma voluntaria para cubrir el “Día da Bici”, si adecuadamente algunos informes indicaban que para una cobertura óptima de los eventos se necesitarían al menos 45.
Finalmente, ningún de los 17 agentes que se habían registrado en los días previos compareció para reanimar a sus compañeros, que ya habían avisado a su vez a Policía Doméstico y Cuidado Civil de las posibles ausencias. Para cubrir esta desidia de efectivos, se echó mano a sitiar los accesos al “Día da Bici” empleando autobuses urbanos en la rotonda de la calle Dalí y en Río Arnoia, y todavía grúas en algunos tramos, tanto para controlar la circulación como por si fuera necesario retirar algún transporte. Un procedimiento que forma parte de las recomendaciones del Tarea del Interior en el caso de contar con pocos efectivos, y por ello se dio aviso previamente a la empresa adjudicataria del transporte sabido ourensano.
A pesar de todo, no se pudieron controlar algunos cruces, y los coches acabaron colándose en el pelotón ciclista, pudiendo hallarse tanto en la zona del Pabellón de Os Remedios como en el Milenio.
El conflicto continúa
Los agentes de la Policía Restringido llevan ejerciendo sus protestas desde el pasado miércoles, cuando en una reunión en la Superioridad, el corregidor, Gonzalo Jácome, les anunció que cesaba el plazo de horas extra las noches de jueves, viernes y sábados con objeto inmediato, y adelantaba su intención de extinguir el presente cuadrante de turnos, donde se trabajan doce horas durante tres días y a posteriori se libran cinco, por otro de ocho horas, lo que levantaba protestas por las dificultades para conciliar y otros aspectos.
Desde entonces, los turnos de indeterminación en la Policía Restringido se han restringido a un agente en el puesto telefónico y otro habitable para intervenir, lo que ha impedido que los coches salieran a patrullar. Los agentes siguen sin cobrar los pluses de nocturnidad y festividad que se les adeudan desde marzo.