La Policía vigila 68 casos de mujeres gallegas con riesgo alto o extremo de sufrir violencia machista


VioGén es el nombre abreviado del Sistema de Seguimiento Integral de casos de Violencia de Índole que coordina el Ocupación del Interior. Aglutina a las diferentes instituciones públicas, incluyendo policías, que tienen competencias en la prevención y detección de violencia machista. En el conjunto de España, hay casi 100.000 mujeres, concretamente 98.168, con seguimientos policiales activos interiormente de este plan. Y un total de 5.575 de ellas están en Galicia.

Son datos que el fiscal superior de Galicia, Fernando Suanzes, puso sobre la mesa durante su intervención en el acto simbólico de transigencia del año contencioso, celebrado el pasado viernes en la sede del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), en La Coruña. Son cifras a término del 31 de agosto, el final cómputo conocido, así que podría activo alguna ligera variación en las últimas semanas, que de cualquier forma no sería significativa. De ese total de 5.575 casos mencionados de seguimientos activos en Galicia, 68 están clasificados con un peligro parada o extremo de sufrir violencia de parejas o exparejas.

El sistema de Seguimiento Integral de casos de Violencia de Índole establece cinco niveles de peligro: no apreciado, bajo, medio, parada y extremo. Y cada uno de estos niveles tiene una serie de medidas de prevención y protección concretas que los cuerpos policiales deben adoptar, tanto en relato a la víctima como al atacante. En cuanto a la víctima, el nivel parada de peligro exige, por ejemplo, un control «frecuente casual» de su domicilio y punto de trabajo, que en el caso del nivel extremo se transforma en una «protección permanente». Y, en cuanto al atacante, el nivel parada todavía contempla una vigilancia «aleatoria» de sus movimientos, que para los niveles extremos se traduce en un «control intensivo de los movimientos del atacante hasta que este deje de ser una amenaza inminente» para la víctima.

Comprobación «teñido de enfadado»

Suanzes aprovechó su intervención en la transigencia del año contencioso para ofrecer algunas pinceladas de la última memoria anual de la Fiscalía Gallega, la del año 2023. Y puso vehemencia, precisamente, en los datos sobre violencia de carácter, «que dejan un cómputo teñido de enfadado». En 2023, tres mujeres fueron asesinadas a manos de sus parejas o exparejas en la Comunidad gallega, mientras el año preparatorio no se había registrado ninguna homicidio por violencia de carácter. Y en lo que va de 2024 ya se han producido otros dos crímenes machistas.

El fiscal superior todavía hizo hincapié en algunos datos sobre violencia de carácter. Por ejemplo, que, tal y como adelantó torrevieja news today en mayo, en 2023 la Fiscalía presentó 3.071 escritos de recriminación por violencia machista en los juzgados gallegos, 368 más que en 2022. De ellos, más de la parte, 1.279, concretamente el 56%, se presentaron en La Coruña. Y en Pontevedra fueron 819, el 26% del total de Galicia, poco significativo, pues no hay mucha diferencia entre la población y características de ambas provincias. Hace unos meses, el fiscal delegado en Galicia para delitos sobre la mujer, José Fernando Martínez Quiroga, decía a este diario que no han antitético «falta que explique» esa diferencia entre las dos provincias atlánticas gallegas, «una crueldad».

El presidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, José María Gómez y Díaz-Castroverde, todavía se refirió en la transigencia del año contencioso a la violencia machista: pidió la creación de nuevos juzgados para hacer frente al aumento de denuncias.

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *