Presentación ideal para el nuevo COB 2024-2025. Buena entrada en el Pazo, buen partido y mejor resultado. El equipo entrenado por Moncho López se presentó en sociedad con todo lo necesario para desear, demandar atención y entrar en el selecto regusto del inclinado deportivo ourensano.
Club Ourense Baloncesto:
Brito (9), Moody (16), S.Rodríguez (5), Krikee (12) y Lisboa (16) -equipo titular- Mendikote (10), López (3), Rosa (14), Fernández (10), Paz (2), Gill (4) y Lagares.
Cartagena:
A.González (11), Blat (11), Martín (3), Van Eick y Rogers (7) -equipo titular- Garuba, Carrera, Gil (8), Jordá (14), Hermanson (3), Ugochukwu (5) y Smallwood (11).
Árbitros:
Asie Quintas, Juan Carpallo y Aitor Gómez.
Incidencias:
Pazo Paco Paz (2.000 espectadores).
Sí, un recién ascendido para comenzar puede ser un rival engañoso para calibrar el nivel del equipo. En todo caso, fue la primera trofeo y una buena exposición de la filosofía de articulación del técnico gallego.
De entrada, el COB aceptó la propuesta del rival. Un Cartagena con dos estilos: deprisa o corriendo. Los cobistas lo asimilaron e incluso le dieron una dorso más a la tuerca. La diferencia es que lo hicieron con mejor criterio y manteniendo el nivel en la defensa.
En los primeros siete minutos, la longevo pega para los locales fue la yerro de físico o de concentración en el falleba del rechazo. Un problema que Moncho López solucionó con la entrada de Romaro Gill en la pista. La presencia del jamaicano terminó con la única esperanza visitante. Sin exigencia de anotar -incluso falló un mate-, intimidó todos los lanzamientos cercanos al aro y permitió atrapar esos rebotes necesarios para comenzar la transición o el contragolpe ourensano.
Con esa seguridad en tu casa, el COB asentó definitivamente su personalidad en la pista. A partir del segundo cuarto, con muy leves lagunas, incrementó la diferencia a los 20 puntos. Pese a no contar con Rosa o Samu Rodríguez por faltas, el resto del equipo mantuvo un ritmo detención y constante en los dos campos.
Es pronto y queda mucho por mejorar. Siempre es buena informe para un equipo con muy buenos mimbres en su defensa, en distinto por su disposición, cohesión y las ayudas constantes. Es evidente que esa esplendidez será crucial contra rivales de más talla física y calidad.
Asimismo lo será el hallazgo extranjero. Los 10 errores de 12 tiros triples intentados en la primera parte fueron la razón de que el COB no sentenciase ayer el partido. Porque todos fueron buenos tiros, por momentos tras una excelente circulación de balón.
Un baloncesto de equipo, “jogo atún”, que en la segunda parte gustó al Pazo y estiró la diferencia por encima de los 30 puntos. En gran parte por el -atención- 7 de 9 en triples. Con seis jugadores por encima de los 10 puntos.
Inmejorable presentación de un equipo que pretende ser uña y carne con su pasatiempo. Esperando retos mayores, que ya están a la dorso de la vértice. Las próximas dos semanas, contra dos rivales de “su” alianza, Oviedo y Cantabria. Dos test más fiables para comprobar el nivel existente y presente del equipo.
Asimismo dos oportunidades para firmar un buen eclosión y convertir el Pazo en una cita más que atractiva esta temporada.