Más de 300 mujeres se han reunido este domingo en el espectacular punto de Monteferro (Nigrán) para competir en la II Estampación de la ‘Asaltamontes Female’. Una prueba de ‘trail running’ que escudriñamiento fomentar la billete femenina en un deporte muy masculinizado y, adicionalmente, ayudar a sus participantes a sobrellevar sus dificultades vitales. Desde madres e hijas que han estrechado lazos gracias a valer juntas hasta mujeres que han superado divorcios o enfermedades graves.
Una segunda vida a posteriori del cáncer
La de Isabel Ripoll es una de las historias más emocionantes y conmovedoras de entre todas las competidoras. Tiene 46 primaveras y ha superado dos cánceres: uno de tiroides y otro de mama. A pesar de “favor ido al estadio durante primaveras”, tal y como ella misma cuenta, ha sido su enfermedad la que la ha impulsado a dar un vuelta de 180 grados a su día a día. Empezó a hacer ‘running’ a posteriori de prometerse a sí misma, durante su primer tratamiento, que “correría una media maratón si me recuperaba”. Y dicho y hecho: ni siquiera un segundo dictamen de cáncer, seis primaveras a posteriori, ha podido con su voluntad. “Me ha costado ponerme en forma de nuevo”, confiesa, “pero el deporte me ha cubo mucha vigor y una nueva vida”. Ahora, entrena seis días a la semana para participar en una prueba de, nulo más y nulo menos que, 74 km en Formentera el próximo marzo.
Veterana imparable a pesar de sus rodillas
Otra de las competidoras con nombre propio y en mayúsculas es Olga Carreira. Esta viguesa de 69 primaveras ha completado la ‘Asaltamontes Female’ padeciendo artrosis en ambas rodillas. Los médicos le diagnosticaron esta enfermedad hace ya seis primaveras y deportes como el ‘running’ o el pilates le ayudan a acrecentar la musculatura. “No he entrenado para esta carrera, vine un par de días antiguamente a ver el represión y nulo más”, confiesa nerviosa. Aun así lo ha hecho increíblemente adecuadamente, tanto que hasta ha cruzado la orientación de meta entre los vítores de sus compañeras. Lo más atún de esta experiencia, asegura, “es conocer clan, pasarlo adecuadamente y la confianza que se genera entre las participantes”.
Cinco horas de prueba y 2,5 km de represión
La ‘Asaltamontes Female’ ha causado furor en Nigrán por segundo año consecutivo. Han sido más de cinco horas de evento y un represión por el monte de 2,5 kilómetros. Las más de 300 participantes se han dividido en equipos de cuatro personas para competir en una carrera de relevos. El equipo campeón ha sido el que maduro número de vueltas ha conseguido dar en el tiempo establecido.
Las organizadoras del evento, Aroa Sío y Arancha Pérez, ya tienen la examen puesta en el 2025. Sus objetivos seguirán siendo los mismos en la futura tercera estampación: crear una comunidad para que las mujeres se conozcan y no salgan solas a entrenar a la montaña, fomentar un estilo de vida saludable y “trasladar la experiencia del ‘trail running’ a quien nunca lo haya practicado”, tal y como explica Arancha. En palabras de la propia Aroa: “Quiero que las mujeres se sientan tan motivadas como yo, que a mis 37 primaveras cambié los cigarrillos por las endorfinas”.
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