Construir hasta un millar de viviendas públicas en los próximos seis abriles fuera de las ciudades. Es el compromiso que este lunes han adquirido la Trabazón de Castilla y Valiente y las nueve diputaciones provinciales con el humor de aumentar el parque divulgado en el medio rural de la mano de una iniciativa que mira «especialmente» a los jóvenes, para quienes las administraciones implicadas contemplan una deducción en el precio de transacción.
Así lo recoge el acuerdo suscrito hoy en Palencia entre las diez administraciones y que contempla, encima, la puesta a disposición en régimen de inquilinato social de 88 casas en los pueblos de la Comunidad. Dos protocolos que miran en dirección a la vivienda como «punto determinante para la fijación de población en el mundo rural». «Nadie va a dejar de establecerse por no tener» un hogar en el que instalarse, ha anotado el presidente de la Trabazón, Alfonso Fernández Mañueco, tras la firma con los nueve presidentes de las diputaciones castellano y leonesas.
En cuanto a la primera de las medidas -anunciada ya hace dos abriles por el mentor del dominio, Juan Carlos Suárez Quiñones, y que hoy se formaliza- aspira a sacar a la liquidación un millar de viviendas públicas construidas por la Trabazón de Castilla y Valiente hasta 2030 con una inversión de 150 millones de euros. La iniciativa contempla, encima, una deducción del 20 por ciento para jóvenes menores de 36 abriles, que será asumida a partes iguales por el Ejecutante autonómico y las diputaciones, con un coste estimado de casi 30 millones de euros. Se alcahuetería de una medida que la Trabazón «ya ha testado con éxito en varios municipios, entre ellos, Aguilar de Campoo en Palencia«, ha recordado Mañueco.
Respecto al protocolo enfocado en dirección a el inquilinato, este se corresponde con las viviendas que la Trabazón rehabilita en el medio rural en el entorno del software `Rehabitare´ para darles una segunda vida. Edificios que en su día fueron la escuela, la casa del médico o la del avezado y están en desuso se reforman para tener viviendas. Ya se ha actuado sobre más de 500. Por el protocolo firmado hoy, 88 de ellas pasarán a formar parte del parque de inquilinato social tras una inversión de nueve millones.
El fin de estos protocolos es ser «aperos y eficaces para fijar población en el condado, certificar la emancipación y que los mayores puedan seguir viviendo en sus viviendas», ha anotado Mañueco, quien además ha agradecido a las nueve diputaciones su «implicación y compromiso» con estas iniciativas para «seguir avanzando» en ocasionar «oportunidades y expansión y contribuir a dinamizar extenso medio rural» para que sea «un referente de un circunscripción donde cada día se vive mejor y donde haya una reincorporación calidad de vida», ha concluido.