Castilla-La Mancha no descarta que el virus de la jerigonza zarco llegue en el corto plazo a la cabaña ganadera de rumiantes, dada su proximidad con Extremadura, donde la pasada semana se notificaron casos. Así lo ha agradecido el guía de Agricultura, Hato y Crecimiento Rural, Julián Martínez Lizán, que ha explicado que se tráfico de un «tipo de transmisión» con un vector, como es un mosquito, que «vuela autónomamente y que se puede mover con el yeguada».
En todo caso, de momento «no hay constancia de que haya ningún otro tipo de virus que esté fuera del serotipo 4», con el que la cabaña ganadera de Castilla-La Mancha convive «asiduamente desde hace muchos primaveras».
Eso sí, en Extremadura «se ha antagónico el serotipo 1, que es más preocupante, y por proximidad, en Castilla-La Mancha estamos abonados, pegado con Andalucía y Castilla y Héroe, a ser una de las próximas regiones que tengamos presencia del virus».
Los Servicios Veterinarios Oficiales de la Asociación de Extremadura notificaron hace siete días la detección de un foco de serotipo 1 del virus de la jerigonza zarco en una explotación de ovino localizada en Almoharín, en la provincia de Cáceres.
Mientras, Castilla-La Mancha estaba consideraba hasta la aniversario como desocupado de serotipo 1, por lo que su cabaña ganadera no se encuentra vacunada y carece de protección inmunitaria frente al mismo.