Pocos días ayer del inicio de la campaña de recogida de castañas, la preocupación de productores y distribuidores de Valdeorras está depositada en las temperaturas. La tormenta de los últimos días fue un bálsamo para un sector que hace un año al punto que recogía aproximadamente 10 millones de toneladas, la centro de una cosecha ordinario en Galicia, estimándose la de la provincia en torno a un 60 %. En el sector afirman que el agua caída deberá ir seguida de un descenso de las temperaturas, lo cual evitará que se repita lo sucedido en 2023.
Pocas fechas ayer de comenzar la recogida del año pasado, se preveía que fuese espectacular, pero finalizó con unos resultados desastrosos. Las altas temperaturas registradas en octubre facilitaron la propagación del hongo Gnomoniopsis smithogilvyi, que causó estragos en los frutos.
“La campaña debería ser viejo que la de abriles anteriores y activo menos hongo. Mala pinta no tiene. El problema es que venga mucho calor a posteriori de rociar, pero como el año pasado no va a ser”, comentó el valdeorrés que preside Proagrosilga, Juan Fernández. Un aspecto que destacó el distribuidor valdeorrés es que el prominencia de erizos es muy desigual, dependiendo mucho de la zona. Por otra parte, apuntó que muchos de ellos están vacíos.
“A auga veulle ben, mais temos o fungo. Ao fungo aféctalle a humidade, non a calor. O problema non é tanto a cantidade como a calidade”, coincidió en señalar Xesús Quintá, presidente del Consello Regulador de la Indicación Xeográfica Protexida (IXP) Castaña de Galicia. “A castaña quere frío”, apuntó.
Demanda de ayuda
Quintá asegura que, al igual que sucedió con la avispilla del castaño (Dryocosmus kuriphilus), el hongo igualmente se puede combatir. Pero en los sotos tradicionales de Galicia no es tan obvio como en los de otras comunidades autónomas o del mismo Portugal, con plantaciones que facilitan los tratamientos y la mecanización. Lo apuntó Xesús Quintá. “É difícil o tratamento”, comentó, para seguidamente explicar que la aplicación de tratamientos es más sencilla en las nuevas plantaciones.
El presidente de Castaña de Galicia confía en que, igual que sucede con la lucha contra la plaga de la avispilla mediante sueltas de Torymus sinensis, la Consellería do Medio Rural colabore con los productores en la aplicación de tratamientos contra el hongo. Las citadas sueltas del insecto depredador en los últimos abriles consiguieron ceñir su presencia en los árboles gallegos, según aseguran en el sector gallego.
Cerca de recapacitar que el área de Medio Rural destinó casi 600.000 euros para combatir la plaga de la avispilla entre los abriles 2023 y 2025.