Bruselas dio su visto bueno a esta modificación en su análisis de la adenda al plan de recuperación, por lo que, una vez que sea aprobada también por los Estados de la UE en el plazo de un mes, eliminará formalmente el pago por el uso de carreteras por el que se había comprometido en el Documento original dentro de las medidas de la nueva Ley de Movilidad Sostenible.
“Ha sido reemplazada (la reforma de los peajes) por disposiciones que promueven el uso del transporte por carretera y ferrocarril para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero”, Así lo explicó en rueda de prensa la portavoz de Economía de la Comisión, Veerle Nuyts.
Así, el Ejecutivo comunitario ha considerado que las opciones alternativas propuestas, que buscan potenciar el transporte de mercancías por ferrocarril, “mantienen el mismo nivel de ambición” que la propuesta original y permiten a España seguir abordando la recomendación de que dé pasos hacia una un sistema de movilidad más sostenible.
En particular, defiende que las nuevas medidas “contribuyen a la reducción de las emisiones del transporte por carretera” y aborda la recomendación que Bruselas había hecho a España de “mejorar su infraestructura ferroviaria” e “invertir en transporte sostenible”.
Además, Bruselas ha tenido en cuenta que el aumento de los precios del combustible ya ha penalizado a los usuarios de la carretera, que sus emisiones se legislarán a nivel comunitario con la introducción de este sector y de la vivienda en el sistema europeo de comercio de combustibles. emisiones (ETS) a partir de 2027.
El portavoz añadió que el cambio se sustenta a través del artículo del reglamento del fondo de recuperación que permite modificar los compromisos si existen. “circunstancias objetivas” que lo justifiquen.