podrían indemnizarle con 300.000 euros


Todo comenzó hace dos abriles, cuando un catalán decidió apañarse a otros miembros de su clan a través de la plataforma MyHeritage, una página cuya función es conectar a familiares lejanos o desconocidos a través de muestras de saliva con carga genética. Albert, nombre con el que se hará relato a él a partir de ahora para preservar su anonimato, descubrió que sus padres no eran los biológicos y que tenía otra clan por delito de un intercambio equívoco de bebés cuando nació en 1972 en el hospital Vall d’Hebron de Barcelona.

Tras denunciar el caso hace un año al Institut Català de la Salut (ICS), ahora se abre una nueva período tras la intervención de la comisión jurídica asesora de la Generalitat este mismo septiembre. Este comité de expertos estima que el Unidad de Lozanía tendría que sufragar 300.000 euros como indemnización por responsabilidad patrimonial “por los daños y perjuicios sufridos oportuno a la defectuosa afluencia recibida en el hospital en el momento de manar”, nos cuenta su abogado José.

El juicio no es vinculante, y desliz conocer la osadía del Administrador del ICS, pero podría influir en esta futura resolución… aunque el Institut ofreció en abril la medio de esta cantidad mencionada, 150.000 euros como compensación.

Albert probó la plataforma por curiosidad

Fue en 2022 cuando Albert quiso probar MyHeritage por curiosidad. Una frotis de mejilla bastó para ser mandada a los laboratorios y poder conocer los resultados unas cuatro semanas posteriormente. Él todavía no lo sabía, pero esos resultados iban a darle un viraje de 180 grados a su vida: una mujer desconocida de Barcelona se planteaba como un posible parentesco. Entonces, el catalán se puso en contacto con ella y le propuso que se hiciera un test hereditario, y aceptó. Los resultados acabaron dando positivo, lo que significaba que uno y otro eran clan.

Fue entonces cuando se propusieron examinar la procedencia vivo de cada uno. Y el resultado les impactó todavía más. El tío de la mujer contactada era del mismo año, el mismo día, y había nacido en el mismo hospital -atendido por el mismo equipo médico y a la misma hora- que Albert. Los certificados del Registro Civil marcan una diferencia entre ellos de casi nada 5 minutos, poco que era cuanto menos, sospechoso. Y la mujer con quien había descubierto un parentesco a través de la app era verdaderamente su sobrina.

La víctima pidió en enero de 2023 a su clan oficial someterse a pruebas de ADN para apurar de disipar las dudas, y los resultados fueron demoledores: parentesco incompatible. Dos palabras que encajaron todas las piezas del puzle y que cambiaron la vida y el pasado de este afirmación para siempre.

El hospital intercambió los bebés

La única explicación posible era que el hospital donde había nacido, el Vall d’Hebron, hubiese cambiado sin querer a él y al otro bebé recién nacido a la misma hora aquel día de 1972. Pero Albert -recordemos que es su nombre ficticio- aún descubrió otro documento más, todavía sobrecogedor: el hombre con quien al parecer fue intercambiado al manar, el hijo biológico de sus padres, había muerto en abril de 2023 y el que sería su hermano biológico vivo, perteneciente a esta otra clan, lo hizo un mes antaño. Toda esta información supuso un shock tremendo para el afectado.

Se procedió entonces a formalizar una petición en mayo de 2023 contra la oficina por responsabilidad patrimonal, fundamentada “en la gala del personal” del hospital que provocó que el recién nacido fuera intercambiado por otro y entregado a su clan no biológica. Por otro costado se reclama la “desliz de información por no poder entrar ni obtener la historia clínica propia ni la de la matriz”. En resumidas cuentas, se reclama por “los daños morales derivados de sobrevenir sido privado de permanecer una relación con la clan biológica, y por la pérdida de la documentación clínica adecuado sobre las circunstancias del parto y del origen”, dicta la petición.

Incluso en dicha denuncia se ha presentado un documentación psicológico donde se refleja que la víctima padece un trastorno de “estrés postraumático” relacionado al hecho de haberse enterado de su vivo procedencia. Adicionalmente, todavía le habría afectado conocer que parte de su clan “vivo” ha fallecido. Su abogado palabra de daños a la integridad íntegro que no tienen “opción”, pero deben ser compensados económicamente.

No es el único caso en España

Adicionalmente, el caso de Albert no es el único en España. En Canarias, el Gobierno compensó con 900.000 mil euros en 2009 a dos hermanas gemelas por sobrevenir sido separadas y cambiada una de ellas por otra bebé. Incluso en La Rioja, donde el Gobierno indemnizó hace tan solo unos meses -este enero- con una cantidad similar, 850.000 euros, a dos chicas intercambiadas por equivocación en una incubadora del que era el antiguo hospital de Logroño en 2002; y otros 735.000 euros de compensación a una de las familias.

Preguntados al despacho de abogados de la víctima catalana si la cantidad de 300.000 euros les parece suficiente, dicen que antes no están de acuerdo ya que reclamaron una compensación de tres millones de euros, pero que esperarán a ver qué resuelve el administrador del ICS, poco que sucederá será “pronto”. En caso de no compartir la osadía del mismo, los abogados podrían acogerse en un plazo de dos meses al Tribunal Superior de Conciencia de Cataluña.

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la presente de antena3noticias.com

Familiares de las 13 personas que murieron del incendio de las discotecas de Murcia piden justicia

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *