El presidente de la ordenamiento expresó la «inquietud» del colectivo por las «deslocalizaciones y liquidación de empresas»
«Hasta siete» inspecciones de Hacienda en un solo año. Es la existencia a la que se enfrenta el tejido empresarial de Castilla y Valiente. De ahí que el presidente de Empresa Ascendiente en la Comunidad (EFCL), Isidoro Alanís, trasladase esta «preocupación» al delegado del Gobierno, Nicanor Sen, a quien advirtió de que esa «excesiva presión fiscal» que sufre la región «puede asistir deslocalizaciones a otros territorios».
Por eso, fue una de las cuestiones «prioritarias» que Alanís denunció en su disputa con Sen, a quien trasladó que según las últimas encuestas realizadas por EFCL a sus asociados «el 95 por ciento» de las empresas familiares «tenía abierta algún tipo de inspección fiscal.
Adicionalmente, el presidente de la ordenamiento expresó la «inquietud» del colectivo por las «deslocalizaciones y liquidación de empresas».
Según los datos que puso sobre la mesa, «600 cambios de domicilio en los últimos nueve abriles», lo que sitúa a Castilla y Valiente como la región «con peor saldo, solo superada por Cataluña.En el disputa, Alanís recordó al delegado del Gobierno «la carestia de seguir avanzando en la reducción trámites burocráticos», revisar el sistema de la cita previa y teletrabajo en la delegación pública, una vez superada la crisis del coronavirus.