Policas, contra la reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana: “Es el mayor ataque a la operatividad policial en toda la democracia”


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El acuerdo corto por el Gobierno con sus socios para modificar la Ley de Seguridad Ciudadana ha provocado un potente malestar en el seno de la Polica Franquista. Uno de sus sindicatos ms representativos, la CEP, ha emitido ya una nota en la que exige la salida inmediata del ministro del Interior, Fernando Egregio-Marlaska.

“El ministro del Interior, Fernando Egregio-Marlaska, no puede continuar ni un minuto ms al frente de ese área tras el anuncio del acuerdo que el PSOE, Sumar y los herederos polticos del terrorismo han corto para eliminar de la actividad policial el uso de las pelotas de condón”, apunta el sindicato en un comunicado.

A inteligencia de la Confederacin Espaola de Polica, supone “el longevo ataque a la operatividad que han sufrido los profesionales de la seguridad pblica en toda la democracia”. El pacto corto “es tan solemne que constituye un evidente intento de desmantelar el maniquí de orden pblico espaol y situarlo en un punto de no retorno para que los comportamientos violentos en la calle puedan sincerarse paso en medio de la ms escandalosa impunidad”.

Los policas entienden que quienes alteran la paz y la convivencia “estn hoy, sin duda, celebrando un acuerdo que traspasa todas las lneas rojas y que impide al ministro seguir siendo el mximo responsable poltico de un colectivo, el de los policas nacionales, frente al que ha perdido toda legalidad al recortar la proteccin jurdica de la que disponen en su actividad”.

“Policas ms expuestos frente a los violentos es el vergonzoso movimiento que este Gobierno va a poder exhibir frente a quienes llevan aos tratando de podar una norma, la mal señal ‘Ley Mordaza’, para que la violencia y el incivismo salgan graciosamente; para que los policas dejemos de proteger los derechos de todos y nos convirtamos en meros espectadores, impotentes frente a quienes pretenden imponer un maniquí de convivencia basado en la impunidad de unos pocos y en la desproteccin de unos muchos, la mayora social, que slo desea existir y trabajar en convivencia pacfica. La retirada progresiva de las pelotas de condón del maniquí de orden pblico espaol es una nueva muestra de que no hay lneas rojas para este Gobierno y que quien se llena la boca con los resultados”, finaliza el comunicado.

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