Un vídeo vírico ha sembrado la polémica sobre los paseos en Camello para turistas. En las imágenes se observa como un camello cae al suelo durante un paseo por el parque franquista de Timanfaya en Lanzarote. Se tráfico de una caravana de camellos que realizaba el trayecto con personas subidas a uno y otro lados de cada apero. Uno de los animales, que iba liado a los que tenía delante y detrás, se caía al suelo con dos turistas encima, un hombre y una mujer. La caída provocó un tremendo susto a los visitantes que se quitaron el cinturón de seguridad que los mantenía sujetos a la apero y salieron corriendo despavoridos en medio del un gran revuelo.
Varios usuarios de las diferentes redes sociales reaccionaban con comentarios pidiendo que se deje de prestar el servicio de excursiones con animales en Timanfaya. El usufructuario de la cuenta @cristogill, publicaba el vídeo y comentaba: “Otra vez Lanzarote. Nos creemos superiores y por eso utilizamos los animales a nuestro antojo. Tenemos potestad sobre ellos y si nos apetece utilizarlos y explotarlos, lo hacemos”. En el pie del vídeo continúa diciendo: “Fíjense en la reacción del que se cae, remotamente de preocuparse por el animal o por la persona que estaba con él, se pone a insultar como un anormal. Sigan subiéndose encima de los animales. Sigan promoviendo esta vergüenza”.
Adicionalmente se queja de que los responsables de los camellos increparon a las personas que calificaron la situación de exceso en torno a los animales. Pero la de este usufructuario no ha sido la única reacción: “¡Que se acabe ya utilizar a los animales para ocio o espectáculos! ¡Pespunte ya!”; “¿Cuándo van a prohibir esto?”; “Este es el turismo que queremos, ¿no?”; “Detener ya. Hay miles de formas de entretenerse que no abusando de los animales”, han sido algunos de los comentarios.
El comunicado de la Asociación de criadores y conservadores del camello
La Asociación de Criadores y Conservadores del Camello Canario lanzó un comunicado para aclarar los hechos: “En ingenuidad, el incidente ocurrió durante una caravana de siete camellos, liderada por el camello que prontuario la fila, encargado de marcar el trayecto para el resto. Durante el trayecto, este camello tomó una dirección equivocada, girando a la izquierda en ocasión de a la derecha. Esto provocó que su apero se enredara con las de los camellos que le seguían. En respuesta a esta situación, uno de los camellos se tumbó instintivamente como medida de seguridad, una reacción natural para evitar complicaciones mayores”. Y subrayan que este comportamiento, conocido como ‘fuchirse’ es una reacción natural del camello en situaciones de enredo y no debe interpretarse como un desplome.
Guacimara Cabrera, presidenta de la Asociación de Criadores y Conservadores del Camello Canario, explica: “Es comprensible que quienes no están familiarizados con el comportamiento de los camellos puedan alarmarse al ver este tipo de imágenes. Sin retención, el camello actuó de guisa instintiva para guarecerse y asegurar la seguridad de los turistas”.
Y recalca que esta actividad cuenta con todas las garantías y seguros necesarios, cumpliendo estrictamente con las normativas de bienestar animal. “El sector camellar es esencial para las Islas Canarias, proporcionando sustento a numerosas familias en Lanzarote, Fuerteventura y otras islas del archipiélago. Esta actividad desempeña un papel fundamental en la preservación de la tradición cultural de la región. Los camellos son un componente integral de la historia y la civilización canaria, y la Asociación se compromete a asegurar su manejo responsable y ético”, añaden.
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