El centro social del pueblo de Espiño, en el concello de Oímbra, celebró este jueves por la mañana el acto de entrega de títulos a los propietarios de tierras incluidas en la concentración parcelaria Espiño-Videferre. Decenas de vecinos de los dos núcleos se acercaron al lugar desde poco ayer de su comprensión.
En total, esta zona de concentración parcelaria ha acabado compendiar un 80% el minifundismo, al producirse de 4.200 parcelas a solo 840, en un espacio de 540 hectáreas.
María José Gómez, conselleira do Medio Rural, se desplazó hasta Espiño, donde hizo entrega de los documentos de titularidad a algunos de los 310 propietarios beneficiados por esta concentración.
La conselleira destacó que las concentraciones parcelarias son una “ferramenta complexa, pero esencial”, claves para la “redución do minifundismo, que tanto caracteriza á provincia de Ourense”.
Gómez estuvo acompañada por la directora xeral de la Axencia Galega de Desenvolvemento Rural (Agader), Paz Rodríguez; el delegado territorial de la Xunta, Manuel Pardo; el director territorial de Medio Rural, José Antonio Armada, y la alcaldesa de Oímbra, Ana Villarino.
“Un día importante”
La regidora lugar coincidió en señalar a las concentraciones como un utensilio “moi necesario”, y subrayó que la de Espiño-Videferre “levaba feita moitos anos, pero os propietarios aínda non tiñan a documentación que acreditaba a súa propiedade, polo que é un día importante”.