La Liga Galega de Empresas Inmobiliarias (Fegein) ha calificado de “extraordinario irresponsabilidad política” la valentía del gobierno municipal de remitir a la Xunta el Plan Xeral de Orden Urbana (PXOM) “con un desconocimiento categórico por parte de los ourensanos”, al mismo tiempo que considera el documento enviado “una cortina de humo para tapar la caótica mandato municipal”, según indicaba su presidente, Benito Iglesias.
Iglesias reflexionaba todavía sobre el impacto que ha supuesto para la ciudad la desaparición de un plan de colocación actual -el actual data del año 1986-, calculando que “la desliz de un plan ha penalizado severamente la creación de empleo al perder más de 5.000 nuevos trabajos en la última lapso”, y que el no disponer del plan “ahuyenta la creación de empresas”. La consejo del presidente de Fegein discurre todavía por el nuevo retraso que supondría que el gobierno autonómico rechazase el PXOM, advirtiendo que “el trámite de un plan fallido solo contribuirá a empeorar la viabilidad económica, social y demográfica de la ciudad”.
Para evitar este rechazo, la confederación ha unido su voz a quienes piden una nueva exposición pública del plan de urbanística, tildando de “inadmisible e inaceptable” que el corregidor pretenda ignorarla. “Aventura una inepto posterior de planeamientos urbanísticos que derivaría en indemnizaciones millonarias”, vuelve a avisar el presidente, Benito Iglesias.