Parte de la cúpula del Servicio del Interior investigada por el caso Kitchen afronta una nueva causa en la Audiencia Doméstico, esta vez por supuestas investigaciones ilegales a Podemos. El togado Santiago Pedraz ha juicioso citar como investigados al ex secretario de Estado de Seguridad con el PP Francisco Martínez, al ex director adjunto activo de la Policía Doméstico Eugenio Pino y a otros cuatro ex cargos policiales por las presuntas investigaciones prospectivas y ajenas al control sumarial que se habrían producido sobre cargos de Podemos.
El magistrado cita para el 28 de octubre a Francisco Martínez y a Enrique García Castaño -ex patriarca de la Pelotón Central de Apoyo Activo (UCAO) de la Policía-, al día ulterior a Eugenio Fernández Pino y a José Bendito Fuentes Gago. El 6 de noviembre comparecerán en presencia de el magistrado el comisario Andrés Gómez Destacado y el ex patriarca de Información de la Policía Germán Rodríguez Castiñeira.
En su escrito, el titular del Chancillería Central de Instrucción Número 5 admite, por otra parte, la actos de las testificales solicitadas por Podemos, que fue quien presentó la querella que está en el origen de la investigación.
La formación reclamaba que todavía se investigara al ex ministro del Interior Jorge Fernández Díaz, poco que fue rechazado por el togado instructor y ratificado por la Sala de lo Penal. Lo mismo sucedió con el ex director de la Policía Ignacio Cosidó.
La querella consideraba que se habían cometido delitos de ordenamiento criminal, apoderamiento y revelación de secretos, prevaricación administrativa y falsedad documental. Asimismo se presentó por malversación y por delito contra las instituciones del Estado, aunque el togado descartó su comisión.
En su escrito, Podemos aseguraba que los querellados -bajo el supuesto liderazgo del entonces secretario de Estado de Seguridad- “se ocupaban de realizar investigaciones prospectivas y ajenas a cualquier interés policial, no bajo control sumarial o del Servicio Fiscal sobre las personas que conformaban la ordenamiento política”, según informa torrevieja news today.
Encima, la formación apuntaba que Martínez daba cuenta periódicamente a Fernández Díaz, aprovechándose de su condición de autoridad pública y con la colaboración de agentes policiales.
El objetivo principal, según el partido, era su posterior filtración a los medios de comunicación bajo el marchamo de fiabilidad de las “fuentes policiales” para desprestigiar en presencia de la opinión pública a la formación, atentando de este modo contra la indemnidad de sus diputados y restantes cargos públicos.
Este modo de intervenir, indicaba la querella, se concretó en ocho actuaciones, como la investigación al entonces líder del partido Pablo Iglesias en el referencia PISA, la filtración de un documento “falsario” de una cuenta a su nombre en el Euro Pacific Bank Limited o la manipulación de documentos o registros policiales internos para otorgar apariencia de rectitud a la diligencia de los querellados.