La Comisión Europea seguirá delante con la imposición de aranceles a la importación de vehículos eléctricos desde China. Sin secuestro, continuará negociando con Pekín para conseguir una opción a la medida.
Bruselas aplicará de forma definitiva los aranceles durante un mayor de cinco abriles. Los Veintisiete no alcanzaron una B en contra de la propuesta en la votación. Del total, cinco votos estuvieron en contra, 10 a valía y 12 abstenciones, entre ellas la de España. El Ejecutor comunitario concluyó que su propuesta “para imponer derechos compensatorios definitivos a la importación de vehículos eléctricos desde China ha obtenido hoy el apoyo necesario de los Estados miembros”.
Estos aranceles serán del 35,3% al fabricante chino SAIC, del 18,8% a Geely y del 17% a BYD.Incluso afectarán a las empresas occidentales que producen en China, como por ejemplo, la estadounidense Tesla, a quien se aplicará un tasa del 7,8%. A las empresas que cooperaron con la Comisión Europea durante la investigación por los supuestos subsidios de Pekín a sus compañías se les ha impuesto una tasa del 20,7%.
Estos aranceles entran en vigor como tarde el 31 de octubre, luego de que se hayan publicado en el Diario Oficial de la UE.
Aunque los aranceles se impondrán en coches eléctricos chinos, Bruselas señala que continuará “trabajando duro” con las autoridades chinas para encontrar una opción compatible con las reglas de la Estructura Mundial del Comercio (OMC). En ese caso, la Comisión Europea no anularía la aplicación de los aranceles, sino que los dejaría en suspenso.
“Más allá de la imposición de aranceles tenemos que seguir avanzando en esta negociación, puesto que es importante la protección de un sector tan importante como el del automóvil y, encima, hacerlo evitando una ascensión de medidas comerciales que puedan ser perjudiciales para todos”, dijo el ministro de Pertenencias de España, Carlos Cuerpo.
España ha decidido inhibirse luego del alucinación que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, realizó a China en septiembre. La Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) dijo que para avalar la competitividad del sector es fundamental contar con una táctica industrial integral” que asegure “el paso a materiales críticos y energía asequible y “expandir la infraestructura de recarga y recarga de hidrógeno”.
“Perjudicará a la cooperación comercial”
La medida ha tenido reacción en China. El Ocupación de Comercio del país avisó en un comunicado que la aplicación de los aranceles “perjudicará a la cooperación comercial” entre Pekín y la UE. Sin secuestro, aseguró “ocurrir tomado nota” de la “voluntad expresada por la parte europea de seguir tratando de resolver la cuestión mediante negociaciones”.
La Cámara de Comercio de China en la Unión Europea (CCCEU) igualmente ha respondido a estos aranceles y ha expresado su “profunda frustración” y su “gran descontento” con la osadía. Considera que las investigaciones antisubvenciones de la Unión Europea sobre los coches eléctricos importados desde el superhombre oriental son medidas proteccionistas “políticamente motivadas e injustificadas“. Desde la CCCEU argumentan que la superioridad competitiva de China en el sector automovilístico “no se debe a subvenciones, sino a una sólida cautiverio de suministro, desarrollada a través de una intensa competencia en el mercado”.
“Estos aranceles no reforzarán la resistor de las industrias locales en Europa ni en otros mercados; por el contrario, corren el aventura de disuadirlas inversiones chinas, socavar la competitividad del mercado europeo y disminuir la ánimo de la cautiverio mundial de suministro de vehículos eléctricos”, avisan.
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